Si estás leyendo esto ya sabes cómo va eso de la última carta. Lo conseguiste, yo no tuve la misma suerte. No te sientas culpable porque sé que si hubiera habido la mínima posibilidad de que me salvaras lo habrías hecho.
Necesito una última cosa de ti: deja el ejército y ve a Telluride. Mi hermana pequeña está criando a sus gemnelos sola. Es demasiado independiente y no aceptará ayuda fácilmente, pero ha perdido a nuestra abuela, a nuestros padres y ahora a mi. Es demasiado para una sola persona. No es justo. Y además hay algo más que no sabes que está rompiendo a la familia, así que necesitará más ayuda que nunca. Si yo no estoy significa que no puedo estar por Ella, no puedo ayudarles, pero tú si que puedes, así que te ruego, como mi mejor amigo, que cuides de mi hermana, de mi familia. Por favor no dejes que lo afronte sola.
La adaptación a novela gráfica de La trilogía de Nueva York, la aclamada obra maestra de Paul Auster, una interpretación posmoderna del género policiaco en la que el lenguaje es el principal sospechoso.
En 1994, Ciudad de cristal, la primera de las tres historias que forman parte de La trilogía de Nueva York, tuvo una adaptación a novela gráfica que se convirtió de inmediato en un clásico de culto aplaudido por la crítica y el público, y que fue publicada en más de treinta países. Durante años, sus lectores han estado pendientes de que las otras dos últimas partes fueran llevadas al cómic. Por fin, la espera ha terminado.
La trilogía de Nueva York de Paul Auster es literatura posmoderna disfrazada de ficción noir, donde el lenguaje es el principal sospechoso. Como una reinterpretación de la literatura detectivesca y de misterio, cada libro explora diversos temas filosóficos. En Ciudad de cristal, un autor de novelas de detectives investiga un asesinato y acaba descendiendo a la locura. Fantasmas presenta a un detective privado llamado Azul que vigila a un hombre llamado Negro por encargo de un cliente llamado Blanco. Y en La habitación cerrada, otro escritor sufre un bloqueo creativo y espera superarlo resolviendo la misteriosa desaparición de un amigo de la infancia.
En Ciudad de cristal, un escritor de novela policíaca se convierte por azar en protagonista de una investigación real y se ve actuando como un detective por las calles de la ciudad de los rascacielos mientras se cuestiona quién es en realidad. En Fantasmas, Azul es contratado por Blanco para seguir a Negro a todas horas, lo que le lleva a perderse en un laberinto de preguntas en el que no está claro quién persigue a quién. En La habitación cerrada, el personaje principal recibe el encargo de buscar a un amigo de la infancia desaparecido que ha dejado una maleta llena de manuscritos inéditos que deseaba que fueran publicados.
En una época en la que el romance parece algo efímero y las relaciones caen una y otra vez en la trampa del ciclo del enamoramiento y el desencanto, ¿cómo saber si hemos encontrado el amor verdadero o estamos atrapados en el subidón químico del enamoramiento?
Una experiencia personal del propio Tolstói fue la inspiración para La tormenta de nieve, que vio la luz en 1856 en la revista El contemporáneo. Una ventisca sorprende a un viajero y su cochero en la estepa rusa y les aparta de su camino. Cuando el cochero decide volverse, el viajero se une a una caravana en la que conocerá a una serie de variopintos personajes. Una obra temprana del gran autor ruso que, en su brevedad, aborda temas como la superación de obstáculos, la vanidad o la búsqueda de reconocimiento.
Tristan Caine, el Cazador, no estaba preparado para la llegada de Morana Vitalio. Tras romper una promesa que llevaba defendiendo años, dentro de él se origina una batalla encarnizada entre su futuro y su pasado. La única certeza que tiene es que la vida de Morana aún le pertenece.
A Morana Vitalio, la línea entre enemigos y aliados cada vez le parece más difusa. Su mundo se ha desintegrado ante sus ojos y, ahora, se enfrenta al vacío de lo desconocido en territorio hostil. La única certeza que tiene es que ella es la dueña de su propia vida.
Unidos por un enigma de hace más de veinte años, Tristan y Morana buscan juntos la verdad. Sin embargo, el misterio de las niñas desaparecidas es solo la punta de un gran iceberg.
Quedan muchos esqueletos por desenterrar.
Y se acerca la tormenta.