En 1956, tras dejar atrás su terrible experiencia en el gulag, Alexandr Solzhenitsyn deseaba perderse en un apacible rincón de la URSS, y se ofreció en las oficinas de empleo como profesor de matemáticas. Mientras buscaba alojamiento en el pueblo al que lo destinaron, vio la isba de Matriona, una anciana viuda que vivía con un gato paticojo y una cabra por toda compañía, y decidió quedarse. En los fríos meses en que se hospedó en su casa, Solzhenitsyn comprendió que Matriona, generosa pero despreciada, «era precisamente el justo sin el cual, como en el dicho, no se tendrá en pie la aldea»: su vida inspiró La casa de Matriona. Otro es el protagonista de Incidente en la estación de Kochetovka, el teniente Zotov, asistente del comandante militar de una estación de tren durante la segunda guerra mundial. Lejos de su mujer, y lamentando que no le hayan destinado al frente, Zotov dirige el tránsito de convoyes y soldados con firmeza, eficacia y ecuanimidad; pero cierto día se presenta en su oficina un hombre afable, en una circunstancia desconcertante, que pondrá a prueba sus creencias.
Cuando el guarnicionero Thierry Hermès instaló su taller en París, por las calles de esta ciudad circulaban unos ochenta mil caballos, y los jinetes más distinguidos encargaban sus sillas de montar a este artesano. Sin embargo, tras la Primera Guerra Mundial, los caballos se vieron sustituidos de forma progresiva por automóviles, y al nieto del fundador, Émile, no le quedó más remedio que reinventarse.
Empezaría por hacer maletas, a las que añadiría un artilugio revolucionario: el cierre de cremallera. Luego llegarían los bolsos de mano, en bandolera o con correas, cabás, alforja o pochette, el mítico «carré» y tantos artículos, siempre con el afán de innovar, de cuidar la fabricación artesanal, y de no hacer nunca demasiado ruido. Estuvo a punto de irse a pique, pero hoy Hermès sigue siendo regentada por la misma familia y es la única gran empresa del lujo que ha logrado mantener su preciada independencia.
¿Qué hace que una casa se convierta en un hogar? Descúbrelo a través de esta tierna historia, con hermosas ilustraciones pintadas a mano y solapas troqueladas. Olivia vive en una casa con una pequeña puerta roja. ratón vive en un viejo roble detrás de la casa. Cuando una tormenta derriba el árbol...
Tras la muerte de sus padres, fallecidos en un trágico incendio, Richard Elauved tiene que mudarse a la remota localidad de Ballantyne, donde vivirá con sus tíos. Allí se convierte en seguida en uno de los marginados oficiales del instituto, algo que se acentúa cuando un compañero de clase llamado Tom desaparece en extrañas circunstancias: todos culparán al nuevo alumno, tan raro, retraído, irritable y taciturno.
Sin embargo, Richard vio con sus propios ojos lo que le pasó realmente a Tom, una escena verdaderamente espeluznante ocurrida en una cabina de teléfono cercana al bosque. Pero ni la policía ni nadie creen su versión... salvo Karen, otra estudiante arrinconada que lo empuja a llegar hasta el fondo de la cuestión.
Las pistas lo conducirán hasta una antigua casa señorial, ahora abandonada. Ante ella, muerto de miedo, rodeado de insectos, Richard descubrirá que lo observa, desde una ventana del cuarto piso, un hombre de rostro inexpresivo. Después, empezará a oír voces.
Galicia, 1941. La miseria y el hambre son lo único que Sara conoce en el pequeño pueblo de Santa Comba donde vive con su madre. Sin embargo, todo cambia cuando abren la mina de volframio. Muchos recurren al valioso "oro negro" para salir de la pobreza de la posguerra y una cierta prosperidad parece instalarse en la zona. Es allí, en la mina de Varilongo, donde Sara conoce a Hannes, un ingeniero alemán que dará un vuelco a su vida. No solo deberán ocultar su romance al principio, sino que los secretos marcarán toda su historia de amor, una historia que pronto se verá amenazada por una trama de conspiraciones e intrigas de la mano de un régimen que no perdona la traición.
En la casa de Kyoko los invitados son bien recibidos a cualquier hora. Ahí se reúnen cuatro jóvenes, de profesiones y caracteres diferentes, y algo en común: una conciencia estoica que les obliga a negarse a sí mismos, a aparentar que no creen en la existencia del sufrimiento en este mundo, acostumbrados a ocultar sus sentimientos, ese espejo roto en pequeños fragmentos de cristal en su interior. En esa casa no se toman en serio los matrimonios, las clases sociales, los prejuicios ni el orden, ni hay temas de conversación prohibidos. Sólo pensar que existe un lugar así en el mundo alegra a esos cuatro jóvenes, para los cuales ese lugar es un refugio y un faro. Yukio Mishima (1925-1970) es uno de los escritores japoneses más importantes del siglo XX. La casa de Kyoko, novela publicada en 1959, cuenta las historias interconectadas de cuatro hombres que representan las diferentes facetas de la personalidad del autor: lo artístico en el pintor, lo atlético en el boxeador, lo nihilista en el hombre de negocios y lo narcisista en el actor.