Un ensayo erudito y ameno sobre la fascinación y el interés de los humanos a lo largo de la historia por los cuervos y su simbología Desde tiempos inmemoriales, cuervos y cornejas forman parte de la historia humana. Pájaros enigmáticos y omnipresentes, han revoloteado por los capítulos de nuestra existencia con un aura ambigua: a veces venerados, otras tantas temidos, los hemos cargado de significados, proyectando en ellos nuestras creencias, miedos y deseos. Los describimos por lo que vemos, pero aún más por lo que imaginamos. A lo largo de los siglos, les hemos atribuido virtudes y culpas, dotándolos de un estatus simbólico que no comparten con ninguna otra ave. En este libro tan riguroso como fascinante, Jorge Fondebrider rastrea la presencia de cuervos y cornejas en mitos, religiones, literatura, arte y ciencia, trazando una historia humana a través de nuestra relación con estas criaturas. Los cuervos en la historia es un ensayo erudito, accesible y fascinante, que no solo nos habla de estos pájaros, sino fundamentalmente de nosotros mismos.
Fue en Eichmann en Jerusalén donde Hannah Arendt empleó por vez primera la expresión «la banalidad del mal». Su consternación ante el hecho de que un hombre que no era un monstruo pudiera actuar como agente del mal más extremo fue objeto de burla, indignación e incomprensión. La tormenta provocada por esa controversia indujo a Arendt a abordar nuevamente las cuestiones e inquietudes fundamentales suscitadas en torno a la naturaleza del mal y la elección moral. Responsabilidad y juicio reúne una serie de escritos correspondientes a la última década de la vida de Arendt, cuando se esforzaba por explicar el sentido de Eichmann en Jerusalén.
El núcleo de este libro es una profunda investigación ética: «Algunas cuestiones de filosofía moral»; en él Arendt aborda la insuficiencia de las verdades morales tradicionales como normas para juzgar lo que somos capaces de hacer y examina desde una nueva óptica nuestra capacidad para distinguir el bien del mal. Y lo justo de injusto. Vemos allí cómo Arendt viene a darse cuenta de que, junto al mal radical del que se había ocupado en anteriores análisis del totalitarismo, existe una forma más perniciosa de mal cuya ejecución no tiene límites cuando el que lo comete no siente remordimientos y es capaz de olvidar sus actos rápidamente.
Una fascinante novela en forma de cinta de Mobius que hace que nos preguntemos cómo nos ven las personas que amamos Una mujer y un hombre se citan en un restaurante del distrito financiero de Manhattan. Ella, una actriz consagrada, está inmersa en los ensayos de su próxima obra de teatro; él, un veinteañero guapo y algo torpe, está empeñado en causarle una buena impresión a aquella dama elegante y respetable que podría ser su madre. Más allá de algunos momentos incómodos y las miradas reprobatorias de varios comensales, el encuentro, del que resulta difícil averiguar qué espera obtener cada uno, se va desarrollando con relativa normalidad, hasta que se abre la puerta del restaurante y, desde la mesa del fondo, la mujer distingue a su marido. Este es el punto de partida de Audición, la nueva novela de Katie Kitamura que por momentos recuerda al mejor Paul Auster. Una obra ambiciosa y brillante en la que la trama, la estructura y los personajes interpelan al lector y lo hacen partícipe del juego, en una vorágine narrativa que lo atrapa y no lo suelta hasta la última página.
Las Leyes es, con mucho, el diálogo platónico más extenso que conocemos. Y no solo eso, sino que además es el que supone los más exhaustivos estudios: historia, teoría, política, educación, códigos penales, sistemas constitucionales, teología, física, medicina, etc. Es el intento más antiguo que ha llegado hasta nosotros de organizar el sistema jurídico de acuerdo con principios racionales. En este segundo volumen de la obra se recogen los libros VII-XII, en los que se establecen las normas que regularán la educación de la juventud, el culto religioso y la economía, se propone un código penal y un civil y comercial, se define la administración del Estado y se describe sus sistema monetario.
Un corpus excepcional tanto para entender el pensamiento romano como para examinar las técnicas retóricas de Cicerón, admirar la depuración de su lenguaje y adentrarse en lo que supuso el derecho romano tanto para su época como para períodos posteriores. Este tomo engloba textos n los que el trasfondo político adquiere un peso específico fundamental.
Un retrato feroz de la adolescencia en el Harlem de los años treinta, una honda reflexión sobre el racismo y el papel de doble filo de la religión.
Un sábado de marzo de 1935, John Grimes, hijo de un autoritario predicador pentecostal de Harlem, cumple catorce años. Esa noche, en la iglesia, entre los cantos y el fervor de los fieles, John se encuentra ante una encrucijada: anhela un destino diferente al que su familia y su comunidad le tienen reservado, el de seguir los pasos de su padre. Pero cuando uno forma parte de un grupo social discriminado, la libertad de elegir puede no estar en tus manos. O puede condenarte a una segregación aún más profunda frente a aquellos a quienes amas. Esa misma noche, John es sacudido por la epifanía que lo enfrentará a la rebeldía y la sumisión, a la lujuria y la inocencia, al odio y la compasión. Un éxtasis que acabará por revelar la ambivalencia en la que su verdadero yo habita. «Si alguna vez hubo un libro que yo tenía que escribir, fue este», dijo James Baldwin de Ve y dilo en la montaña, la novela que en 1953 reveló por primera vez al mundo el genio y la furia del autor afroamericano. Pocos años más tarde, ya era considerada un clásico de la literatura estadounidense. Con su simbolismo oscuro y profético, esta singular novela de iniciación se inspira en la adolescencia del propio autor para componer un relato febril en el que la lucha por la individualidad queda entretejida con la historia de un pueblo marcado por el racismo y el poder represivo de la religión.
La calle de los Cinco Aromas (Una actuación rompedora en su título original) es una de las obras más importantes de Can Xue. La novela nos cuenta la historia de un adulterio infundado y nos describe a la Señora X, una dama atractiva, misteriosa e inconformista que causa una agitación exacerbada entre los habitantes de la calle, quienes hablan de ella y la observan hasta la obsesión.
Can Xue nos habla en esta parodia, en un tono irónico, sobre la sexualidad, la verdad y la mentira, de manera tan lúcida y completa que los lectores ignorarán el simbolismo general y se volverán adictos al flujo interminable de las palabras. La novela se acaba convirtiendo así en un carnaval de voces y actos transgresores. Aquí se desvela no sólo la mentalidad del pueblo chino de arriba abajo, como han destacado los críticos, sino, lo que es más importante, se hace burla de toda pretensión por crear una psicología fiable y encontrar una verdad absoluta sobre los asuntos humanos y divinos. Una vez más, Can Xue nos conduce a una exploración de la parte más oscura y misteriosa del alma humana. Para este propósito, no ha escatimado en ningún tipo de persona, ningún concepto, ninguna teoría; ni siquiera la crítica de arte es una excepción. Su estilo narrativo único da a esta historia ordinaria una connotación estética extremadamente singular.
Como escribe la narradora omnisciente: «El mal está entre nosotros con la forma de una persona de belleza aterradora. Si tan sólo pudiera consolaros, ahora que sabéis por qué vuestros ojos están siempre llenos de lágrimas».
Varios personajes tienen sus propias opiniones y alcanzan una posición que es más importante que la historia misma. La descripción de los acontecimientos pasa a ser algo secundario: lo que vamos a encontrar son discusiones y razonamientos brillantes, divagaciones filosóficas, discursos ideológicos y especulaciones descaradas, así como numerosas inducciones y deducciones con pretensiones científicas aparentemente serias y meticulosas.