Múltiples intereses están en juego en el norte de Suecia: tierras apenas habitadas y ricas en recursos naturales son codiciadas por las multinacionales más poderosas bajo la excusa del ecologismo. La corrupción y el dinero fácil pronto atraen a los grupos criminales más peligrosos. Hacia allí se dirigen Lisbeth Salander y Mikael Blomkvist por diferentes motivos: los servicios sociales han informado a Salander de que su sobrina adolescente, Svala, necesita un tutor legal tras la desaparición de su madre, y Mikael acude a la boda de su hija con uno de los políticos más influyentes de la región.
El frío norte se convertirá en el escenario en el que Lisbeth Salander, Mikael Blomkvist y la indomable Svala se enfrenten a una red de corrupción amparada en la explotación de energías renovables y combatan la violencia contra las mujeres, en medio de un ambiente político en el que asciende, imparable, la ultraderecha.
192 d. C. Varios hombres luchan por un imperio, pero Julia, hija de reyes, madre de césares y esposa de emperador, piensa en algo más ambicioso: una dinastía. Roma está bajo el control de Cómodo, un emperador loco. El Senado se conjura para terminar con el tirano, y los gobernadores militares más poderosos podrían dar un golpe de Estado: Albino en Britania, Severo en el Danubio o Nigro en Siria. Cómodo retiene a sus esposas para evitar su rebelión, y Julia, la mujer de Severo, se convierte así en rehén. De pronto, Roma arde. Un incendio asola la ciudad. ¿Es un desastre o una oportunidad? Cinco hombres se disponen a luchar a muerte por el poder. Creen que la partida está a punto de empezar. Pero para Julia la partida ya ha comenzado. Sabe que solo una mujer puede forjar una dinastía.
De viaje por Estados Unidos para estudiar los métodos de la policía de ese país, Maigret asiste a una audiencia en la que se busca determinar si la muerte de una muchacha arrollada por un tren debe clasificarse como suicidio u homicidio.
Con una reflexión de fondo sobre la justicia, la novela es una historia típicamente norteamericana en la que aparecen grandes espacios, carreteras en el desierto y soldados sin escrúpulos, lo que demuestra la rapidez con que Simenon comprendió el imaginario estadounidense que por entonces empezaba a globalizarse
Tras oír un grito de mujer seguido por un disparo en un edifico de la alta burguesía parisina, un transeúnte acude a las autoridades para denunciar un presunto crimen.
Tocará a un joven Maigret, por entonces adjunto del comisario, desplazarse al lugar de los hechos para tratar de penetrar en un entorno social hermético.
En este precuela de sus investigacinones más famosas, nos retrotraemos a sus comienzos en la fuerzas del orden durante la Belle Époque, cuando desputan ya su sagacidad, su paciencia y su capacidad para comprender la naturaleza humana.
Cuando vuelve de hacer compra, la criada Félicie descubre que han asesinado a su empleador, el jubilado Jules Lapie. Llamado a investigar, el comisario Maigret no tarda en darse cuenta de que esa joven poco agraciada sabe más de lo que dice, pero también de que su carácter soñador la hace proyectar en la realidad anhelos y fantasías románticas.
¿Cómo conseguir que confíe en él? ¿Y a quién protege con su silencio? Pocas veces un testigo ha causado tantos problemas al famoso comisario.
Tras la muerte de su padre, el prestigioso empresario alemán Eric Zimmerman decide viajar a España para supervisar las delegaciones de la empresa Müller. En la oficina central de Madrid conoce a Judith, una joven ingeniosa y simpática de la que se encapricha de inmediato. Judith sucumbe a la atracción que el alemán ejerce sobre ella y acepta formar parte de sus juegos sexuales, repletos de fantasías y erotismo. Junto a él aprenderá que todos llevamos dentro un voyeur, y que las personas se dividen en sumisas y dominantes... Pero el tiempo pasa, la relación se intensifica y Eric empieza a temer que se descubra su secreto, algo que podría marcar el principio o el fin de la relación.
Cuando la gente ve fantasmas, siempre se ve primero a sí misma», afirma Stephen King, y pocas reflexiones servirían mejor que esta como moraleja de sus historias: el mundo de la fantasía está poblado por las sombras de la conciencia.
Los relatos de Pesadillas y alucinaciones II son otros tantos retazos de esas sombras, las que enturbian los límites entre el sueño y la vigilia, la realidad y el horror que subyace en lo real.
Hace años, el monarca de Idris firmó un tratado con el reino de Hallandren según el cual el rey Dedelin enviaría a su hija mayor, Vivenna, para casarse con Susebron, el rey-dios de Hallabdren. Vivenna ha sido adiestrada durante toda su vida para ser una novia adecuada para Susebron y así cumplir con su deber y ayudar a forjar una paz estable entre los dos reinos. Ese era el plan, pero el monarca de Idris envía a su hija Siri, desobediente e independiente, en lugar de Vivenna.
Mientras intenta encontrar su lugar en la corte de Susebron, Siri descubre la verdad oculta sobre el rey-dios. En Idris, Vivenna se siente intranquila y teme que su hermana no esté preparada para esa nueva vida, por lo que decide viajar a Hallandren. Allí se reúne con la gente de Idris que trabaja en la capital, Telir, y comienza una nueva vida de espionaje y sabotaje.
¿Y SI VOLVEMOS A QUEDAR DENTRO DE UN AÑO, EL MISMO DÍA?
¿Y EL AÑO SIGUIENTE? EL MISMO DÍA, A LA MISMA HORA, EN EL MISMO SITIO.»
Ben y Fallon se conocen por casualidad un 9 de noviembre cuando sus vidas están cambiando. Ella está a punto de instalarse en Nueva York para perseguir su sueño de convertirse en actriz de teatro, y Ben quiere ser escritor. Pasan el día juntos, pero la intensidad de lo que comparten los lleva a fijar una cita anual: cada 9 de noviembre, durante los próximos cinco años, se volverán a ver. Una cita para revivirlo todo. Una cita para entenderlo todo. Y desafiar lo imposible...
«—No quiero ser el primero, Fallon. Quiero ser el último.
—Y yo quiero que seas el primero y el último.»
La polémica presentadora de radio Jordan Briggs ha conseguido ser una de las voces más famosas del país, con un estilo de lo más personal: es incapaz de contenerse y dice siempre lo que piensa, por impopular que sea, a micro abierto frente a millones de oyentes.
Cuando uno de sus oyentes, Bernie, le propone empezar un juego en directo, Jordan lo ve cómo la mejor forma de empezar la mañana y acepta, sin darse cuenta de que, sin querer, va a abrir una puerta al pasado y el juego de Bernie se va a convertir en una trampa mortal que dejará muchas víctimas en su camino.
Está claro que Bernie quiere venganza, y Jordan comprenderá que toda acción tiene sus consecuencias… La policía tiene las horas contadas para conseguir atar cabos y anticiparse a este asesino que siempre va un paso por delante.