El camino que hemos emprendido se vuelve sinuoso, escabroso y empinado. Quisiéramos encontrar una sombra para protegernos del sol que quema y divisar un pequeño arroyuelo donde saciar nuestra sed. Seguimos caminando, muchas veces creyendo que nadie nos acompaña, que andamos solos. Pensamos que no encontraremos una ruta mas cómoda para andar y seguimos abriendo trocha mientras caminamos. De repente , divisamos un claro, un hermoso valle llano, colorido y atractivo. Unos pasos mas adelante, nuestros pies se topan con una inscripción: Esta es tu porción aquí esta tu herencia, y con letras perfectamente trazadas dice Dios: Yo soy tu herencia y tu copa.
Si el " Tao Te Ching " atribuido a Lao Tse (publicado ya en esta colección) supone la manifestación más contemplativa de la concepción taoísta del mundo, los textos atribuidos a Chuang Tse son la cara más práctica o descriptiva del mismo, hasta el punto de integrar lo que hoy en día llamaríamos un " arte de vivir " fundamentado en el Tao. La aceptación activa de éste, la llamada a la " no acción " y a entregarse al fluir de la existencia, la negación de la sabiduría meramente intelectual, su cuestionamiento de la realidad y la defensa de la utilidad de lo inútil hechas a través de sus deliciosas y llamativas fábulas y aforismos, hacen del Chuang Tse una vía de aproximación al Tao alternativa y a la vez complementaria del " Tao Te Ching " en la cual podemos entrar como quien se va sumergiendo poco a poco en un agua cristalina, tomando de aquí y de allá lo que sintamos útil para nuestro viaje.