¿Quiénes son los fascistas? ¿Sigue vivo el fascismo?
En los últimos años ha tenido lugar un resurgir y una popularización del término «fascista» para conceptualizar fenómenos políticos más bien recientes, como el crecimiento de los partidos de ultraderecha y la consagración de las «democracias iliberales».
Sin embargo, lo que un día fue un adjetivo calificativo que designaba una realidad muy concreta de la Europa de entreguerras, hoy en día se emplea como epíteto descalificativo de forma muy laxa y para denigrar al adversario político.
En este libro, dos historiadores expertos en las guerras y dictaduras del siglo pasado desgranan las nuevas narrativas que estructuran el debate político contemporáneo y estudian si la revitalización de los fenómenos políticos nacionalistas y xenófobos se corresponde realmente con el contexto originario en el que tenía sentido usar el término fascista.
Ellos, los fascistas proporciona al lector no especializado herramientas analíticas y conceptuales desde la historiografía y la ciencia política para entender qué fue realmente el fascismo y si es posible que vuelva a tener lugar en nuestra época.
Una obra imprescindible para diseccionar y comprender el concepto de moda en España y Europa durante la última década, y para estar vacunados frente al empleo torticero de la terminología política.
La Ley Gascón consta de un único artículo y una apostilla, a saber: «Toda sátira es profecía. Toda parodia es eufemismo». Es posible que esto sea cierto en todas las épocas, pero una de las características de la conversación pública actual es el ciclo informativo de veinticuatro horas y siete días a la semana, que va muy deprisa y que a la vez no se dirige a ninguna parte. No solo se confunden lo urgente y lo importante, también se mezclan lo real y el simulacro.
En los últimos cinco años España ha vivido un golpe de Estado posmoderno, cuyos protagonistas todavía no saben si iba en serio o no; una moción de censura contra un presidente del Gobierno que decidió emborracharse mientras lo echaban, y de la que salió un nuevo presidente apoyado por los que habían protagonizado un pronunciamiento civil unos meses antes; el primer Gobierno de coalición, con el sostén de un partido que se oponía a la casta y que consiguió colocar a un matrimonio en el Consejo de Ministros; el ascenso y hundimiento de un partido de centro liberal y el surgimiento de una fuerza de ultraderecha. Mientras, científicos sociales explicaron lo que es el sesgo y luego lo ejemplificaron con su comportamiento.
Enfrentado a tamaño panorama, Daniel Gascón habla de temas que le importan a través de formas que le gustan, con el humor como lente fundamental y la viñeta como ilustración certera. Fake news es una especie de crónica de hechos alternativos, así como un extraño intento de diagnóstico. Porque, como la realidad se empeña en recordarnos cada día, toda sátira es profecía y toda parodia es eufemismo.
El 10 de enero de 1992 una tormenta sorprendió a un carguero que cruzaba el Pacífico desde Hong Kong hasta Washington. Doce contenedores cayeron al mar. Uno de ellos se abrió y liberó 28.800 bolsi-tas de juguetes de plástico al mar. Miles de animales de goma, entre los que se encontraban patitos amarillos, ranas verdes, castores rojos y tortugas azules, navegaron por las corrientes oceánicas hasta naufragar, ser presa de los animales marinos o quedar varados en playas inexploradas.
El periodista Donovan Hohn leyó la noticia y decidió seguir el rastro de los juguetes de plástico. Este hecho, en principio anecdótico, se convirtió en una odisea accidentada que lo llevó hasta China, Alaska, Hawai, Escocia y el Ártico, lugares en los que fue testigo del complejo entramado de las compañías marítimas, de la minuciosidad del trabajo de los oceanógrafos, de los riesgos de los marineros disidentes y del oscuro mundo de las fábricas de juguetes chinas. Moby-Duck es un viaje trepidante a las profundidades del océano divertido y curioso. Un recorrido científico, mítico, con moraleja ecologista, que se lee como una novela.
El ideario político, filosófico y moral de uno de los más importantes pensadores contemporáneos. En 1971 la Universidad de Cambridge invitó al gran lingüista norteamericano Noam Chomsky a dar unas conferencias en homenaje a Bertrand Russell, cuyo contenido, reproducido en este libro, ofrece no sólo los puntos de vista del autor sobre el filósofo, sino además una lúcida introducción a los aspectos lingüísticos y políticos del pensamiento de Chomsky. Esta obra (dividida en dos partes, con títulos bien significativos: «Acerca de la interpretación del mundo» y «Acerca de la transformación del mundo») produjo, en su día, un impacto mucho mayor que Los nuevos intelectuales, el primer libro político de Chomsky.
Uno de los libros más famosos de la segunda mitad del siglo XX, el más difundido, el más veces traducido y editado, no tiene lectores ni se encuentra fácilmente hoy en día. No es un fenómeno literario; es un fenómeno sociológico y político. Que no se engañe el curioso lector, este es un manual para la lucha, otra forma de l lamar a la guerra. Un instrumento eficaz como lo fueron para Mao, en la Larga Marcha, la linterna o los mapas. El joven revolucionario ha de llevarlo consigo siempre, consultarlo, aprenderlo de memoria, dormir con él y guardarlo en un bolsillo de la camisa. Es la guerra del pueblo contra sus enemigos, capitalismo e imperialismo. Estos son tan poderosos que el único modo de ganarla es multiplicar los soldados de la joven guardia roja. Del libro se han publicado hasta hoy más de novecientos millones de ejemplares, lo que lo convierte, tras la Biblia y el Corán, en el título más veces publicado de la historia.
El miedo marca una época en la que están avanzando los populismos de derecha, aumentan los casos de depresión y se experimenta el capitalismo como una coyuntura crítica. El miedo es síntoma de una situación social de incertidumbre. La clase mayoritaria ve peligrar su futuro y el individuo se siente arrojado a un mundo en el que ya no se siente resguardado ni representado.