Una voz combativa y franca, sin barreras, que habla de «la tierra que duele, el viento que llora cuando se muere de frío, la mera existencia cuando te deja de pertenecer».
De furia y miel, es el resultado de varios años de trabajo, con un ambicioso abanico temático que subyugará a los lectores, especialmente a las jóvenes que se reconocerán en su subjetividad más combativa, más fresca y desenfadada: sin cortapisas despliega un enfoque femenino de la realidad de los cuerpos, las rutinas del amor y del trabajo, la vida que nos enaltece o nos hunde según el tiempo que nos toca vivir. Aquí aborda desde su particular y intuitiva voz poética: «el dolor que me reconoció en mis peores noches, los intentos en los que fracasé y todas y cada una de las veces en las que se me cerraron las puertas y me dijeron que no».
«De joven fui de izquierdas, pero luego maduré» es la frase en la que Toni Cantó plasma la profunda desilusión de un verdadero converso. A través de un repaso de su propia biografía -su paso época como modelo profesional, la movida madrileña, su exitosa carrera de actor y presentador de televisión, sus inicios como diputado y su actual actividad en la política-, el autor analiza el camino vital e intelectual que lo ha llevado desde la izquierda a la derecha. El resultado es este libro, sincero y no menos polémico, con el que muchos se sentirán identificados, y que trata temas como la justificación de la violencia, la censura, la superioridad moral, el nacionalismo y la cursilería en política. Sin medias tintas, estas memorias son un verdadero aporte para la discusión y una defensa de los valores de la libertad.
«En mi habitación pegué un póster del Che Guevara. Y en el radiocasete ponía a Lluís Llach y cantaba los coros de L'estaca. Miraba mal a los curas y a las monjas. Hablaba de la sanidad cubana y del arte ruso sin conocerlos... El capitalismo era el infierno y Estados Unidos, el demonio; pero yo quería un walkman, el Levis de etiqueta roja y soñaba con visitar algún día Nueva York».
Una historia política e intelectual de Hispanoamérica para comprender los desafíos democráticos actuales.
¿Cuál es el estado de la democracia en Hispanoamérica? Para responder a esta cuestión es esencial remontarse a los orígenes. En De la democracia en Hispanoamérica, Santiago Muñoz Machado recorre con rigor y profundidad dos siglos de historia política latinoamericana, desde las independencias y las primeras constituciones hasta el neoconstitucionalismo actual.
Retratando a personajes fascinantes y relatando la implementación de políticas transformadoras y episodios gloriosos, así como tiempos oscuros que erosionaron la libertad, este libro ofrece una visión completa de los desafíos y logros de los regímenes democráticos. Analiza con exhaustividad cómo las peculiaridades históricas y culturales de Hispanoamérica han moldeado su relación con la democracia liberal, ofreciendo al lector valiosas herramientas para abordar los dilemas actuales y comprender la importancia que presenta la cuestión de la democracia.
Tras toda una vida vinculado al ejército de Prusia, Carl von Clausewitz (1780-1831) escribió un tratado que cambió para siempre el arte militar. Según su parecer, guerra y política van de la mano: el espíritu bélico nace de las ideas y los sentimientos de un territorio y las batallas, por tanto, deben situarse en un marco lógico e histórico. Estos postulados dieron pie a un cambio que convirtió a De la guerra en un título crucial en la historia del pensamiento. La presente edición ofrece una selección de la obra al publicar sus libros I-III y VIII de forma íntegra y en escrupulosa traducción de Carlos Fortea, realizada directamente del original alemán.
Moralista capaz de ver la realidad con los mismos ojos y la misma riqueza de imaginación que los grandes novelistas de antaño, este libro recoge reflexiones y sátiras de Piergiorgio Bellocchio, exégesis de lugares comunes conservadores y progresistas sobre la vida política y social de Italia desde los años ochenta, en plena derrota de la izquierda y el auge del consumismo televisado que acabaría llevando a Berlusconi.
Benjamin Constant publicó su opúsculo De la responsabilidad de los ministros en 1815. Existe una segunda edición de 1817. El texto apareció pocos meses después de la promulgación de la Carta constitucional de 4 de junio de 1814, llamada a regir en Francia tras la restauración borbónica. La intención del autor fue seguramente contribuir a que ese texto constitucional fuese interpretado y aplicado a la luz de la experiencia de la Inglaterra de su tiempo, de manera que sirviera de base para un régimen auténticamente liberal y, por consiguiente, alejado tanto de la reacción absolutista como del autoritarismo jacobino y bonapartista. Así, Constant expone la teoría y la práctica inglesas en materia de responsabilidad ministerial, que se condensan en la institución del impeachment. Su idea central es que la responsabilidad ministerial es una condición indispensable para la existencia de un régimen liberal. Sin embargo, desde un punto de vista intelectual y más allá de la intención política, el principal problema era que la idea misma de responsabilidad de los ministros distaba de ser nítida, incluso en aquella época.