A la caza de Moby Dick es una mirada sobre los apuros de la naturaleza humana para seguir el ritmo cada vez más exigente de una civilización muy alejada ya de nuestros orígenes. La humanidad se enfrenta a cambios radicales en su devenir. Por una parte, el modelo vigente de civilización presenta desequilibrios estructurales que conducen a un colapso general, a una crisis maltusiana que tendría graves consecuencias en la vida de la gente. Por otra, la Inteligencia Artificial y la biotecnología están desarrollando herramientas que tienen el potencial de transformar la naturaleza humana, produciendo una nueva especie de poshumanos. José David Sacristán afronta abiertamente estos problemas del presente y aplica la mirada del arqueólogo para situarlos en el amplio marco del devenir histórico.
A partir de su experiencia en el equipo de investigación sobre abusos en el cine español de El País, la periodista Ana Marcos reflexiona sobre cómo su trabajo ha impulsado cambios culturales e institucionales. Y constata que lo que ocurre en el mundo del espectáculo es solo un ejemplo más de cómo opera la cultura de la violación en su manera de integrar y silenciar las violencias contra las mujeres.
¿Qué es la cultura?, preguntó el ingenuo. Un jardín sin letrinas, respondió el ingenioso.
Gracias a esta visión beatífica de la cultura, hemos construido un mundo capitalista que exuda transparencia, empoderamiento, autenticidad y humanitarismo. Los lenguajes que utilizamos para hablar de nosotros mismos nos convierten en una suerte de ángeles de la democracia. Y ello sin que, al tiempo que nos concebimos culturalmente en un espejo tan favorecedor como el de la igualdad y la diversidad, dejemos de actuar como criaturas interesadas que trabajan, consumen y, en definitiva, practican los rituales del turbocapitalismo.
Esta tensión entre nuestras dos almas apenas es hoy un eco apagado que no levanta ninguna sospecha. Es como si cultura y capitalismo, enemigos históricos durante mucho tiempo, se hubiesen fusionado en el nirvana del culto al yo, se decline este en la mediocridad de los intereses o en la sublimidad de los sentimientos.
Frente a esta antropología un tanto pazguata, cabría insistir, con Bernard Mandeville, el deslumbrante autor de La fábula de las abejas, en que no podemos ser inocentes en sociedades prósperas. Es decir, que el idealismo moral, incluso el propio de democracias subyugadas por la religión de la cultura, el activismo sentimental y la prédica del empoderamiento, no halla cabida en unas rutinas y actividades sociales pautadas por los vicios privados que engrasa el capitalismo.
Este es el primer libro que revela cómo, en la actualidad, ya hay profesionales de distintos sectores que están empezando a colaborar incorporando en su trabajo y en sus vidas la aceptación de un colapso social probable o inminente.
Esta corriente social y cultural, llamada Adaptación Profunda, se ocupa de los cambios personales y colectivos que podrían ayudar a nuestras sociedades a prepararnos para una ruptura o un colapso como consecuencia del clima.
Los autores de esta obra parten de la premisa de que nuestros actuales sistemas económicos, sociales y políticos no podrán ser resilientes al cambio climático y, como respuesta a esta asunción, describen una serie de alternativas solidarias y creativas mediante las cuales la gente está proponiendo respuestas al desafío más difícil que la humanidad haya tenido que afrontar jamás.
La corriente Adaptación Profunda ofrece un marco de apoyo transversal y multidisciplinar para responder a la aterradora realidad de la creciente perturbación climática. El compromiso de este movimiento está dirigido a reducir el sufrimiento colectivo al tiempo que salvamos lo máximo posible de la sociedad y del mundo natural.
Si El valor de la atención, nos sumergía en las causas y consecuencias de vivir pegados al teléfono móvil, este nuevo libro aborda otra de las mayores obsesiones de la vida moderna: perder peso.
Cuando Johann Hari vio su foto como cliente del mes en el Kentucky Fried Chicken que había a la vuelta de la esquina, constató que tenía un problema grave con su alimentación, su peso y su salud. Fue en ese momento cuando acudió al médico y empezó a inyectarse Ozempic, el nuevo fármaco contra la obesidad que ha revolucionado el mundo de la sanidad y la industria farmacéutica. Algunas predicciones sugieren que, en pocos años, una cuarta parte de la población de Occidente recurrirá al mismo tratamiento. Para sus defensores, medicamentos como Ozempic prometen una verdadera cura, contrarrestando riesgos como la diabetes, el cáncer y la muerte prematura. Pero, ¿son realmente tan buenos como parecen?
¿Qué implica replantearse la posibilidad de un mundo liberado del capitalismo? En el marco de una crisis del neoliberalismo, los nuevos movimientos sociales –excluidos, sin papeles, sin empleo, sin vivienda, migrantes, pueblos indígenas– proponen iniciativas desde abajo. Jérôme Baschet analiza en este libro las experimentaciones sociales y políticas de las comunidades zapatistas, en las que participa desde hace años, para imaginar nuevas formas de vida alejadas de la lógica del dinero.
No obstante, el modelo zapatista no es tomado como universal ni como gran relato de futuro, pues la crisis mundial no afecta a todos de la misma manera. Las mutaciones contemporáneas en el mundo del trabajo y en nuestra vida íntima, que nos obligan a nuevas formas de producción y consumo, han rediseñado nuestro presente. Sin embargo, pese a la abundancia de literatura crítica, no han madurado aún los proyectos de emancipación. No nos basta con la crítica: hemos de ser capaces de imaginar nuevos mundos posibles.
Conjugando proyección teórica y conocimiento directo de una de las experiencias de autonomía más reflexivas de las últimas décadas, Jérôme Baschet explora, en suma, vías alternativas para la elaboración práctica de nuevas formas de vida en el siglo XXI.
Durante siglos, los territorios bañados por el mar Adriático han sido punto de encuentro de un efervescente intercambio comercial y cultural. Allí se entrecruzan constantemente los caminos de Occidente y Oriente, conviven católicos, ortodoxos y musulmanes, y comparten mirada los universos latino y balcánico. Ahora, cuando el mapa geopolítico de Europa se ha desplazado hacia el sur, hacia un Mediterráneo fronterizo con África y el Oriente Próximo, la región adriática está a punto de alcanzar una nueva relevancia, no ya continental, sino global. Es una zona donde se viven en primer plano los nuevos populismos, las batallas energéticas, las crisis de los refugiados y el renovado poder de Rusia y China.
«Se me abrió un espacio semántico en el que la negritud tomaba parte en la conformación de la identidad europea […]. Un continente de favelas caboverdianas, mercadillos argelinos, chamanismo surinamés, reggae alemán y castillos árabes. Sí, también todo esto forma parte de Europa […]. Con mi piel marrón y mi pasaporte británico —en el momento de escribir estas líneas, seguía siendo un pase gratuito a la Europa continental—, una fría mañana de octubre partí en busca de los afropeos». Afropean es un reportaje sobre aquellos europeos de ascendencia africana que hacen malabarismos con sus múltiples lealtades y forjan nuevas identidades; un mapa alternativo del continente, que nos lleva a lugares como Cova da Moura, el barrio de chabolas caboverdianas en las afueras de Lisboa con su propia economía sumergida; Rinkeby, el distrito de Estocolmo que es un 80 por ciento musulmán; la antigua Universidad Patrice Lumumba de Moscú, donde los estudiantes de África Occidental siguen aprovechando los lazos establecidos con la Unión Soviética durante la Guerra Fría, y Clichy-sous-Bois, en París, donde se originaron los disturbios de 2005.
Las grandes tecnológicas nos han vendido la ilusión de que la inteligencia artificial es una herramienta que traerá riqueza y prosperidad a la humanidad. Pero escondida debajo de esta optimista superficie se encuentra la sombría realidad: una fuerza laboral precaria formada por millones de personas que trabajan en condiciones espantosas.
Alimentar la máquina es una investigación urgente y fascinante sobre la intrincada red de organizaciones que mantiene este sistema en marcha. Basado en cientos de entrevistas y miles de horas de trabajo de campo, este libro muestra las vidas de los trabajadores y los sistemas de poder que determinan su futuro. Nos enseña, también, cómo la IA es una máquina de extracción que procesa conjuntos de datos cada vez más grandes y se alimenta del trabajo de la humanidad para impulsar sus algoritmos, y detalla lo que debemos hacer para luchar por un futuro digital más justo.