Fundado por Zenón de Citio en Atenas hace 2.400 años, el estoicismo y sus reflexiones y enseñanzas gozan de buena salud como brújula para orientarnos en una época tan confusa como la nuestra. Tal vez su éxito se debe a que, si bien el mundo ha cambiado mucho desde que los antiguos filósofos estoicos desarrollaron su disciplina, las grandes cuestiones que nos afectan como individuos y como sociedad siguen pareciéndose más de lo que pensamos a las que preocupaban a aquellos pensadores de la Antigüedad.
Con una cuidadosa selección de los pensamientos de figuras tan importantes como Séneca o Marco Aurelio, esta obra pone a tu alcance las reflexiones de los grandes maestros del estoicismo y las sitúa en el contexto de nuestro tiempo para dar respuesta a una serie de grandes temas que como individuos debemos afrontar si queremos alcanzar una vida buena y llena de sentido. Así, cuestiones como el autoconocimiento, la resistencia ante la adversidad o la búsqueda de un sentido a la vida encuentran en los estoicos un modo de estar y pensar en el mundo que sin duda nos interpela y nos orienta en nuestras ajetreadas vidas.
La historia del espionaje moderno arranca con la Primera Guerra Mundial y la que quizá haya sido la espía más llamativa de la historia: Mata Hari. Desde esa temprana fecha hasta nuestros días el uso de espías y el desarrollo de los servicios de inteligencia no ha parado de crecer, convirtiéndose en una de las grandes fuerzas que dominan el mundo.Top Secret. Un siglo de espías: de Mata Hari a Snowden nos muestra la evolución de las técnicas de espionaje, marcadas por la creciente sofisticación de una tecnología impensable hace poco más de un siglo. Y es que el mundo de la inteligencia ha desarrollado unos recursos y una cultura propia que podrían llegar a suplantar al poder soberano elegido por la voluntadpopular.Desde esa temprana fecha, hasta la actualidad, Fernando Martínez Laínez repasa la historia de algunos de los más destacados y sorprendentes espías que ha dado la profesión, ofreciéndonos una panorámica de la etapa más decisiva de la historia del espionaje.Como nos recuerda el siempre citado Napoleón: "ni la bravura de la infantería, ni de la caballería o la artillería han decidido un número tan elevado de batallas como esta arma maldita e invisible de los espías".