Fernando de Herrera fue de los primeros escritores españoles en celebrar formalmente la batalla de Lepanto. La inmediatez y el impacto público del acontecimiento, así como la ausencia de textos castellanos que lo hubieran abordado con desempeño suficiente, fueron las causas que el poeta esgrimió para justificar la escritura de la obra. Herrera intervino aquí y allá a lo largo del libro para dar cuenta de su quehacer como historiador, pero también hizo las veces de hombre de letras, de modo que esta obra se convirtió en referencia oficial para la monarquía hispánica. Los autores que en los años sucesivos se ocuparon de la batalla acudieron reiteradamente al discurso construido por Herrera, ya fuera como fuente de información o como modelo literario.
Baltasar Gracián reúne en esta obra 300 aforismos e ideas sobre la conducta humana presentes en sus obras, a las que añade comentarios explicativos no menos valiosos.
El autor, conocido por su conceptismo propenso a juegos de palabras y sentidos, tiende a sintetizar y «oscurecer», pues está convencido de que así el lector aprovechará más su mensaje.
Esto, que puede convertir en difíciles algunos textos, les concede, al mismo tiempo, una belleza poco común y les permite conservar su vigencia y utilidad práctica. Hasta tal punto, que desde la década de los noventa este libro es un éxito de ventas en muchos países, en donde se presenta como manual de instrucciones y consejero «sobre cómo llevar una vida de éxito, pero responsable, en una sociedad gobernada por el egoísmo».
«Lo bueno, si breve, dos veces bueno.»
Las heroínas son Marianne, Elizabeth, Fanny, Emma, Anne o Catherine. En sus órbitas no tardan en aparecer caballeros de dudosa estirpe como John Willoughby o de impecable fibra moral como Mr. Darcy. Diferenciarlos, sin embargo, no es tan fácil como puede pensarse. Y el verdadero amor rara vez está donde se espera.
En estas seis novelas magistrales, que funcionan con la puntualidad de comedias clásicas, las jóvenes descubren que el camino hacia el matrimonio está tan lleno de encantos como de desencantos, y que perseguir los propios ideales supone a veces desafiar a la sociedad que los ha inspirado. Con ironía y amabilidad, Jane Austen demuestra que es no solo la gran observadora de su época, sino una analista insuperable del corazón humano. Sin duda, Virginia Woolf no se equivocaba cuando la llamó «la escritora de libros inmortales»; esta cuidada edición completa ofrece la oportunidad perfecta para comprobar que siguen tan vivos como siempre.
Salambó es una novela histórica de gran importancia para las letras universales por tratarse de un texto escrito a partir de una minuciosa investigación por parte de Flaubert. El relato se ubica en el siglo III en la llamada Guerra de los Mercenarios (en Cartago tras la primera Guerra Púnica) e incluye, para deleite de sus lectores, personajes como Salambó y Matho que son llevados por amores, traiciones, pérdidas, vacíos y los dolores propios de una historia cruel y violenta.
Publicada originalmente en 1897 por entregas, El Hombre Invisible relata las contradicciones de un joven y brillante científico que se desprende de toda ética en pro de su sed de dominio y lucro personal. Este clásico atemporal del escritor británico H. G. Wells, conocido como el padre de la ciencia ficción, nos pide reflexionar acerca de los límites éticos de la ciencia en esta época de veloces avances médicos y tecnológicos.
La novela empieza en un día de nieve cerrada, con la llegada de un hombre, cubierto con vendas, sombrero y gafas oscuras, a un pequeñísimo pueblo inglés. A los pocos días, el inquietante personaje recibe un paquete con un cargamento lleno de tubos de ensayo y productos químicos, y se encierra a trabajar en un misterioso experimento. Todo indica que ha sufrido un terrible accidente. Sin embargo, la curiosidad de los vecinos puede más que la compasión y poco a poco conseguirán arrancarle a este forastero su terrible secreto.
Para Heinrich von Kleist (1777-1811) una novela consistía en la narración de un «acontecimiento inaudito», según la definición de Goethe. Sus personajes son héroes hamletianos sometidos a los imponderables del destino, enfrentados a situaciones límite que les plantean retos existenciales que surgen del caos. El presente volumen reúne toda la obra narrativa de Kleist: dos novelas cortas: Michael Kohlhaas y , y seis relatos más.
Michael Kohlhaas (1806), inspirado en varias crónicas del siglo XVI, narra el destino trágico de un tratante de caballos que, tras sufrir el abuso de poder de un terrateniente y movido por un noble deseo de justicia, acaba cometiendo fatalmente las peores atrocidades. Este relato marcó profundamente al autor de El castillo, Franz Kafka. La Marquesa de O (1808) cuenta la historia de una joven viuda que vive en una ciudad al norte de Italia con su padre, un militar de alto rango. En medio de las guerras napoleónicas, la ciudad es tomada por el ejército ruso, la marquesa está a punto de ser violada por unos soldados pero es rescatada por un coronel del ejército invasor. Meses después, la marquesa descubre que está embarazada, aunque no ha conocido varón, y busca desesperadamente al padre de la criatura.
Entre los relatos cabe destacar El terremoto de Chile y La mendiga de Locarno.