Con la novela El castillo de Otranto (1764) de Horace Walpole se inició la novela gótica. En ella ya estaban presentes todos los elementos que caracterizarían el género: un castillo medieval, un malvado aristócrata, una joven inocente confinada y perseguida por laberintos subterráneos, criptas, desapariciones misteriosas y presencias sobrenaturales. En el Romanticismo y a lo largo del siglo XIX el género floreció y sentó las bases para una tradición aún hoy viva, no solo en literatura sino también en el cine y en la música pop. Esta agenda ilustrada ofrece efemérides y citas que recuerdan y homenajean esta estética que nunca ha pasado de moda.