¿Cuándo leíste por última vez unas cifras en un titular y te preguntaste si realmente eran ciertas? ¿Sabes que hay una herramienta que te ayuda a verlo todo con mayor nitidez y no son unas gafas de rayos X?
Se trata de los números y los datos que manejan las estadísticas, indispensables en el relato con el que se construye hoy en día la actualidad política, económica y social. Y para comprender la realidad cambiante y compleja en la que vivimos no se necesita un doctorado en matemáticas. Basta un poco paciencia y sentido común, pero sobre todo, se requiere la curiosidad que Tim Harford, autor de El economista camuflado, sabe contagiar a sus lectores para observar el mundo con otros ojos.
¿Cuáles son las reglas esenciales para vivir que todos deberíamos conocer? Regla n.° 1: mantente erguido con los hombros hacia atrás?, como las langostas; regla n.° 8: di la verdad, o por lo menos no mientas; regla n.° 11: no molestes a los niños cuando montan en monopatín; regla n.° 12: cuando te encuentres un gato por la calle, acarícialo.
Jordan Peterson, «el pensador más polémico e influyente de nuestro tiempo», según el Spectator, nos propone un apasionante viaje por la historia de las ideas y de la ciencia ?desde las tradiciones antiguas a los últimos descubrimientos científicos? para tratar de responder a una pregunta esencial: qué información básica necesitamos para vivir en plenitud.
Con humor, amenidad y espíritu divulgativo, Peterson recorre países, tiempos y culturas al mismo tiempo que reflexiona sobre conceptos como la aventura, la disciplina y la responsabilidad.
EN UN CALUROSO DÍA DE VERANO
Un coche acelera por las calles de Helsingør. Cuando llega al puerto, el conductor sigue su camino, y se adentra y sumerge directamente hacia el mar frío y oscuro.
UN CUERPO EN EL AGUA.
Pero no se trata de un suicidio. La autopsia revela que este hombre lleva un tiempo muerto. Fue asesinado hace dos meses y su cuerpo ha sido congelado.
TODO SE VUELVE MÁS FRÍO.
A medida que se descubren más cuerpos, Fabian Risk debe cazar a un asesino que parece tener una misión: preservar el cadáver de sus víctimas y crear la muerte perfecta.
Los lunes: Historia; los martes: Literatura; los miércoles: Artes plásticas; los jueves: Ciencia; los viernes: Música; los sábados: Filosofía; los domingos: Religión. Una lección al día. 365 lecciones al año. Cinco minutos de esfuerzo diario para: conocer los hitos y los personajes que marcaron el desarrollo de la civilización occidental, codearse con los grandes escritores y sus obras más relevantes, comprender los movimientos artísticos y sus figuras, entender las maravillas de la ciencia de una forma fácil, dar un repaso a nuestra herencia musical y saber qué inspiró a los grandes compositores, acceder a los mayores pensadores de la humanidad y obtener una visión global de las religiones más importantes y sus principios...
El libro que estabas esperando.
Sé culto, sé libre.
El auge y declive de una gran pasión, el amor feroz de dos personas que parecían conjurarse en contra de una vida serena.
Partiendo de un episodio ocurrido en Madrid en 1939, la narradora de esta historia cuenta la apasionada y tormentosa relación de sus padres, y cómo la personalidad desmedida de él y el corazón débil de ella marcaron el pulso de la vida de toda la familia.
A corazón abierto es una novela que recorre nuestro país a lo largo de un siglo de grandes cambios y encierra un homenaje a una generación, la de quienes permanecieron en España en la inmediata posguerra, aquellos que, sin queja ni lamento, se concentraron en sobrevivir.
Desde la mirada empática y curiosa de una gran observadora que sabe transformar en ficción cada destello de la memoria, Elvira Lindo convierte a sus padres en personajes literarios para aproximarse a ellos con libertad, lucidez y sabiduría. Como si de una composición musical se tratara, cada capítulo es una demostración de gran técnica puesta al servicio del puro placer de narrar las luces y las sombras de un pasado convertido para siempre en gran literatura.
Tener un affaire con un compañero de trabajo siempre sale mal, y si además yo soy la jefa, peor. Si un jefe se enrolla con una subordinada se entiende, incluso se aplaude. Sin embargo, cuando el jefe es una mujer, se critica y si, al final la cosa acaba mal, es ella quien paga el pato. ¿Me equivoco? De mí se dicen muchas cosas: que soy altiva, déspota, adicta al trabajo, inflexible..., pero no son más que halagos. A pesar de todo, cometí el error de fijarme en Fernando. Si él se percató, no lo mostró, y como ocurre casi siempre, cuando alguien te gusta, te portas como una hija de perra.
Hace poco más de dos años organizamos en la empresa una fiesta para agradecer a mi padre sus años de dedicación. En un momento de torpeza, se me volcó la copa y le manché el traje. Justo a él, no podía haberme pasado con otro invitado. No, fue con él. Y allí ocurrió lo impensable...