Juan Villoro relata en La figura del mundo algunos pasajes memoriosos en torno a su padre, el pensador mexicano-catalán, Luis Villoro. Sin el afán de escribir una biografía en estricto sentido, Juan evoca aquí la vida singular de quien fuera filósofo, luchador social, zapatista y autor de una obra fundamental. En este libro hace una aproximación a una figura a la vez íntima y pública, adentrándose en las complejidades de cualquier vida, narrando con maestría instantes que se desdoblan para entender el ubicuo presente. Recupera así la esencia de un padre quien estuvo presente en la vida familiar de un modo intangible, un padre que debe ser indagado por un hijo que intuye sus afectos y renueva, de este modo, el pasado.
Escrito con gran sensibilidad y agudeza, este libro condensa el asombro y la emotividad de un autor para el que la escritura se convirtió en «una permanente carta al padre».
Contaminación de los ríos, embriones congelados, coronavirus, sida, agujero de ozono, robots… ¿Cómo comprender estos “objetos” extraños que invaden nuestro mundo? ¿Proceden de la naturaleza o de la cultura? Hasta aquí, las cosas eran simples: para los científicos, la gestión de esta división tradicional del trabajo no puede explicar la proliferación de híbridos. De ahí el sentimiento de pavor que generan y que los filósofos contemporáneos no consiguen disipar.
¿Y si hubiéramos tomado el camino errado? De hecho, nuestra sociedad moderna nunca funcionó de acuerdo con la gran división que sustenta su sistema de representación del mundo: la que opone radicalmente la naturaleza a la cultura. En la práctica, los modernos no dejaron de crear objetos híbridos, que proceden tanto de la una como de la otra y que se niegan a pensar. Nunca fuimos verdaderamente modernos, y hoy en día, para comprender nuestro mundo, hay que cuestionar ese paradigma fundador.
Traducido a más de veinte lenguas, Nunca fuimos modernos renovó profundamente los debates de la antropología porque modificó por completo la división entre naturaleza en singular y culturas en plural.
Al ofrecer una alternativa al posmodernismo, Bruno Latour abrió nuevos campos de investigación y brindó a la ecología posibilidades políticas inéditas. Como homenaje a este pensador original y único, que falleció en octubre de 2022, hemos creído oportuno reeditar el presente volumen, donde se ofrecen múltiples herramientas para afrontar con rigor los innumerables retos que se le plantean al ecologismo.
¿Que nos enseñan los estoicos sobre cómo vivir?
Un libro elegante y profundamente reconfortante que muestra por que el estoicismo es la filosofía de nuestro tiempo.
En los últimos tiempos se habla mucho de esta corriente, pero ¿cómo pensaban realmente sus miembros? John Sellars destila y entrelaza las ideas clave de los tres grandes estoicos romanos (Seneca, Epicteto y Marco Aurelio) ofreciendo tambien instantáneas de sus fascinantes vidas.
Las obras de estos tres grandes tratan fundamentalmente sobre cómo vivir: entender nuestro lugar en el mundo, afrontar las adversidades, hacer un mejor uso del tiempo, controlar nuestras emociones y orientarnos en nuestras relaciones con los demás. Sus ideas pueden, en definitiva, guiarnos en nuestra búsqueda de una existencia más placentera.
El intenso encuentro personal entre maestro y discípulo es lo que interesa a George Steiner en este libro, una reflexión acerca de la infinita complejidad y la sutil interacción de poder, confianza y pasión en los géneros más profundos de pedagogía. Basado en las Conferencias Norton sobre el arte y las tradiciones de la enseñanza, Lecciones de los Maestros evoca a muchos personajes ejemplares: Sócrates y Platón, Jesús y sus discípulos, Virgilio y Dante, Brahe y Kepler, Husserl y Heidegger, entre otros. Fundamentales en la evolución de la cultura occidental son Sócrates y Jesús, maestros carismáticos que no dejaron enseñanzas escritas ni fundaron escuelas. En los esfuerzos de sus discípulos, en los relatos de pasión inspirados por su muerte, Steiner ve los comienzos de un vocabulario interior, los reconocimientos cifrados de buena parte de nuestro lenguaje moral, filosófico y teológico. Después analiza una serie de tradiciones y disciplinas, referidas todas ellas a tres temas subyacentes: el poder del maestro para aprovechar la dependencia y vulnerabilidad del discípulo; la complementaria amenaza de subversión y traición al mentor por parte del discípulo; y el recíproco intercambio de confianza y amor, de aprendizaje y enseñanza entre profesor y alumno.
Un antídoto epicúreo para la ansiedad.
¿Cómo vivir una vida feliz? Hace más de dos mil años, el filósofo griego Epicuro ofreció una respuesta simple: lo único que realmente necesitamos es placer. Hoy tendemos a asociar la palabra "epicúreo" con el exceso indulgente y el simple disfrute de la comida y el vino, pero el hedonismo ligero y la autocomplacencia decadente están a años luz de la vida placentera que perseguían Epicuro y sus seguidores, más preocupados por los placeres mentales y por eludir el dolor incluso en los tiempos difíciles. Su objetivo, en definitiva, era una existencia de tranquilidad y satisfacción.
Sobre la Ilustración es la reunión de los tres fundamentales textos que Michel Foucault dedicó en los últimos años de su vida, entre 1978 y 1983, a la cuestión de la Ilustración. Con el replanteamiento de esa cuestión, y mucho más allá de una mera reflexión historiográfica, el autor francés lleva a cabo una profunda reflexión sobre el presente y la propia filosofía. Desplazados con respecto al «lugar postmoderno» en que algunos intérpretes han querido ubicar a Foucault, y sin hacer tampoco de la Ilustración una herencia que hubiera que preservar a toda costa, esos textos reivindican el carácter ilustrado y moderno de la filosofía que es posible y necesaria en la actualidad. Su condición de conferencias o seminarios hace de estos tres textos un ejemplo vivo del pensamiento foucaultiano aunque, a diferencia de otros de sus análisis concretos sobre la locura, el poder o la sexualidad, se encuentra en ellos un planteamiento explícito de carácter «metafilosófico» acerca del objeto, método y límites de la práctica filosófica, cuyo conocimiento es esencial para comprender el sentido general del proyecto filosófico de Foucault.
Al ser un manual breve ofrece la ventaja del bosquejo rápido, en el que los rasgos esenciales y el sentido del conjunto quedan vigorosamente destacados al prescindir de la multiplicidad de pormenores. No es propiamente una obra de consulta (a esto se presta la Historia de la filosofía, en dos tomos, del mismo autor), sino que sirve de iniciación en la materia. La misión del historiador no se agota en la simple exposición de las ideas filosóficas, sino que además debe invitar, desde su especial enfoque, a revivir el hecho histórico y a repensar los problemas y las doctrinas, contribuyendo a la formación filosófica general del lector. La finalidad que persigue el autor es sobre todo iniciar en el espíritu de la filosofía, ofreciendo una clara visión del proceso histórico que ha conducido al planteamiento de los problemas filosóficos y ha provocado la meditación sobre ellos.
No cabe duda de que uno de los más potentes efectos que la filosofía de Spinoza produjo durante los tres últimos decenios del siglo XVII fue el de conferir una unidad de intención crítica, a veces desmedida en su violencia, a judíos y cristianos (ya fueran católicos o reformados), místicos y teólogos racionales, cartesianos y anticartesianos, oratorianos y jansenistas. El odio teológico y metafísico suscitado por el judío de Áms-terdam fue unánime, si bien las estrategias y tácticas desplegadas para aniquilar su doctrina fueron varias. De todas ellas se hace eco Fierre Bayle, guardando y difundiendo por los siglos su memoria. Pero lo hace construyendo a la vez, paciente y laboriosamente, a lo largo de más de veinte añqs y en prácticamente todas sus obras, una imagen mítica y, como tal, perdurable del famoso y temido «ateo de sistema». De esta manera, y dado que los escritos que aquí se ofrecen constituyen una suerte de corpus fundamental —al que se ha visto obligado a recurrir todo aquel que durante la práctica totalidad del siglo xvm quisiera informarse sobre la vida y la doctrina de Spinoza—, los efectos provocados por su filosofía comienzan a transformarse. El spinozismo quedará convertido en una de las más potentes condiciones de la elaboración del programa filosófico de la Ilustración más crítica y radical.
Discípulo de Platón, Aristóteles (384-322 a.C.) es considerado como uno de los mayores genios de Occidente y su filosofía marcó indeleblemente no sólo la historia intelectual del mundo cristiano (el movimiento escolástico es sólo un ejemplo de su influencia), sino también el pensamiento medieval judío y musulmán. En la “Metafísica” Aristóteles rebate la teoría platónica de las Ideas y expone su propio concepto de las realidades suprasensibles, en el cual convergen ontología y teología; la fusión de ambas, denominada por el autor “filosofía primera”, es el tema de esta obra que contiene algunas de las más fecundas y seminales ideas aristotélicas.
Introducción y traducción María Luisa Alía Alberca