Arrakis, también llamado Dune: un mundo desierto en pos del sueño de convertirse en un paraíso, cuna de mil guerras que se han extendido por todo el universo y de un anhelo mesiánico que intenta alcanzar el sueño más antiguo de la humanidad...
Paul Atreides: un personaje mítico, perturbado por la cercana presencia de una sombra dominante: su hermana Alia. Y frente a ellos, los grandes intereses económicos, políticos y religiosos que sacuden los espacios interestelares: la CHOAM, la Cofradía espacial, el Landsraad, la Bene Gesserit...
Todo ello, y mucho más, conforma esta segunda entrega de «Dune»: un fresco impresionante y una obra cumbre de la imaginación.
Grace y Jaxon estaban unidos por un vínculo inquebrantable, eran compañeros… hasta que regresó Hudson.
«Siento que estoy a punto de llegar al límite. Si intentar graduarme en una escuela para seres sobrenaturales ya era suficientemente estresante, ahora resulta que el estado de mi relación ha pasado de ser complicado a ser un imposible… Y por si no fuera suficiente Bloodletter ha decidido lanzarnos una bomba de proporciones épicas a todos...
Pero bueno, si lo piensas, ¿cuándo algo en Katmere Academy ha sido normal? No dejan de suceder cosas: Jaxon se ha vuelto más frío que un invierno de Alaska. El Círculo no está preparado para mi próxima coronación y, como si las cosas no pudieran empeorar, ahora hay una orden de arresto por los supuestos delitos que cometimos Hudson y yo, lo que implica una sentencia de prisión de por vida con una maldición mortal e inquebrantable.
Habrá que tomar decisiones... y me temo que no todos sobrevivirán.»
Laurie no cree en el amor a primera vista. Piensa que una cosa son las películas y otra, la vida real. Sin embargo, un día de diciembre, su mirada se cruza con la de un desconocido a través de la ventanilla empañada de un autobús. Surge la magia y Laurie se enamora perdidamente, pero el autobús arranca y sigue su camino por las calles nevadas de Londres.
Está convencida de que es el hombre de su vida, pero no sabe dónde encontrarlo. Un año después, su mejor amiga Sarah le presenta a Jack, su nuevo novio, del que está muy enamorada. Y sí, es él: el chico del autobús.
Laurie decide olvidarle, pero ¿y si el destino tiene otros planes?