"No tengas miedo", le susurré. "Somos como una sola persona". De pronto me ebrumó la realidad de mis palabras. Ese momento era tan perfecto, tan auténtico. No dejaba lugar a dudas. Me rodeó con los brazos, me estrechó contra él y hasta la última de mis terminaciones nerviosas cobró vida propia. "Para siempre", concluyó.
El día D acerca. Todavía no se sabe dónde ni cuándo, pero los alemanes están convencidos de que será pronto. Felicity Clariet, Flick, es una de las agentes más valiosas de la unidad encargada de las operaciones de sabotaje que opera en el Norte de Francia. a flick le consta que el éxito del desembarco aliado depende de que las líneas de comunicación con berlín no funcionen.
«¿Qué es lo evidente?, te preguntarás. Lo evidente es que todo forma parte de un plan maestro para que las almas se encuentren».
Así comienza el enigmático manuscrito que el hombre de las gafas redondas entrega a Ruth en el momento más desconcertante de su vida. Entre sus páginas, ella encontrará un hilo del que tirar para deshacer su madeja de disfraces y mentiras.
¿Quién es ese desconocido que aparece y se desvanece como por arte de magia en las noches más locas de Madrid? ¿Por qué se tropieza siempre con él en esas madrugadas de polvos blancos y pastillas del amor? ¿Pueden dos almas sincronizarse con un choque de pupilas?