El éxito en nuestra profesión es dinámico, no estático. Ya sea que nuestro objetivo consista en mantener el éxito actual, forjar un éxito prolongado o avanzar a un éxito aún mayor, no sólo debemos estar dispuestos a aceptar el cambio, sino también a estar alertas al momento en que deberíamos iniciarlo.
Con frecuencia las personas sienten que sus métodos y sistemas son buenos y sólidos, y que no necesitan modificarlos. “Si sirve, no le metas mano.” Por desgracia, esta consigna no siempre es cierta. Lo que funcionó bien en el pasado quizá ya no sea el mejor enfoque para el presente o el futuro. Sin importar qué tan bueno pueda ser lo que estemos haciendo hoy, es posible que los cambios en las circunstancias indiquen la necesidad de hacer las cosas de manera diferente.
Ya sea en el trabajo o en nuestra vida personal, si queremos progresar debemos estar dispuestos a hacer cambios, a menudo de gran envergadura, en el modo en que trabajamos o incluso vivimos la vida.
Félix Chacaltana Saldívar es un burócrata que lleva una vida sin sobresaltos como fiscal del distrito adjunto en Lima. Pero todo cambia cuando es enviado a su natal Ayacucho, al que regresa después de muchos años y donde debe encargarse de una extraña investigación de asesinato. En medio de las celebraciones de Semana Santa y enfrentado a la indiferencia de sus superiores, las pesquisas lo llevarán por caminos cada vez más oscuros, en los que descubrirá hasta dónde pueden llegar un hombre y la sociedad cuando la muerte se convierte en la única certeza.
En este impactante thriller Santiago Roncagliolo explora los últimos años de un periodo sangriento y aterrador en la historia de Perú, cuando la ideología terrorista de Sendero Luminoso y un gobierno marcado por el hambre y la corrupción se enfrentaron en una guerra terrible, en la que sobornos, intrigas, torturas, asesinatos y desapariciones fueron el pan de cada día.
Nada es tan fácil y simple en la vida de alguien como yo.
¿Qué se siente al vivir con tres chicos tan guapos?
Eres tan afortunada. Que envidia. Vivir con esas bellezas, que privilegio.
¿Cómo puedes vivir con ellos?
¿Te has tirado alguno?
¿Podrías conseguirme su número de teléfono?
Eso es solo un poco de lo que he tenido que lidiar desde que los chicos Hidalgo crecieron y se convirtieron en el sueño húmedo de todas las chicas de este lugar. Artemis, Ares y Apolo Hidalgo son los responsables de muchos suspiros de chicas en las calles y con los que crecí aunque no seamos familia. Muchas personas me creen afortunada, pero están tan equivocados sobre mi vida, no saben mi historia, no todo es color de rosa en la vida de una chica como yo.