Todo parecía que estaba perdido cuando la malvada madrastra de la princesa Aurora lanza un hechizo sobre el palacio real, hasta que la princesa encuentra un vestido encantado que tiene el poder de hacer realidad los sueños.
La segunda aventura de la Tribu chatarra, la divertida serie de cómic infantil de Fermín Solís
Después de escapar del malvado Señor Amo Supremo y dejar atrás Mundo Basura, nuestra querida tribu llega a un lugar nuevo y desconocido: Isla Bosque. Allí descubrirán que en el mundo hay más cosas que basura y chatarra, conocerán a divertidas criaturas y se encontrarán… ¡sorpresas monstruosas!
Un cómic perfecto para primeros lectores, con letra mayúscula y con diálogos sencillos y muy divertidos.
El profesor Tarambana tiene una manera de enseñar bastante poco formal. Se dirige a sus alumnos como "especie de gusanos verdes y asquerosos" y, para enseñarles modales, les da consejos como, por ejemplo: es un símbolo de distinción limpiarse la boca con la manga de quien tengamos al lado en la mesa a la hora de comer; siempre debemos señalar con el dedo a todo aquel que sea diferente a nosotros; o, si queremos que nos hagan un favor lo más rápido posible, la mejor manera es repetir lo que queremos sin parar hasta que el otro pierda la paciencia... Su discurso es tan políticamente incorrecto que actúa como una psicología inversa terriblemente efectiva y divertida para los niños. Pero para que funcione, es necesario que los lectores sepan captar la ironía tras las palabras del profesor, por lo que recomendamos este libro para niños de más de 6 años.
El profesor Tarambana es un experto en todología, y en esta segunda lección nos enseñará todo lo que sabe sobre la salud. Acompañado de su ayudante, Número 13, nos dará algunos consejos para mantenernos sanos: hacer quince comidas copiosas al día, nunca acercarse a una fruta o verdura, y tener siempre las manos sucias. Un libro que actúa como una psicología inversa terriblemente efectiva para los niños. Para que funcione, es necesario que los lectores sepan captar la ironía tras las palabras del profesor, por lo que se recomienda para niños de más de 6 años.