Érase una vez un molinero muy pobre que, al morir, dejó al menor de sus hijos tan solo un gato. Pero no era un gato cualquiera... Pronto descubrió el hijo del molinero la suerte que había tenido con ese gato, que, con un gran ingenio, logró que su amo se convirtiera en marqués.
Pulgarcito es un niño pequeñito, pero ingenioso e inteligente. ¡Y muy valiente! ¿Quieres ver cómo se enfrenta a un terrible ogro? ¡Ayúdale en sus aventuras!
Al igual que el aviador de la novela El Principito, Antoine de Saint-Exupéry sufrió un accidente mientras pilotaba un avión y cayó en pleno desierto del Sahara junto a su amigo y copiloto André Prévot. Solos y sin apenas comida, rápidamente sufrieron los efectos de la deshidratación
y comenzaron a tener alucinaciones, hasta que, afortunadamente, un beduino los encontró y los salvó.