Dulce, amargo o con un toque de canela, el amor tiene muchos sabores. «La historia de este desastre es me dijiste que no tenías corazón, y yo te ofrecí el mío». El amor puede ser muy dulce o tristemente amargo, lo que es innegable es que siempre volveremos a probarlo. Una tacita de ti te recordará esos amores que te cambiaron, aquellos que te rompieron el corazón, pero, sobre todo, te hará sumergirte en aquellos que te dejaron un sabor de boca inolvidable. Esta nueva edición es ilustrada e incluye un prólogo escrito por la autora especialmente para ti. Además, encontrarás más de cuarenta poemas inéditos, perfectos para dedicarlos a esa persona especial o a alguien que quieras olvidar.
El duende Gilbert es el primero en admitir que estaba, ejem, equivocado. En realidad, los uni-cornios organizan las mejores meriendas y los dragones hacen una sopa de helado buenísima. Pero esta vez, puede confirmar que ¡LOS YETIS SON LO, ABSOLUTAMENTE, PEOR! Claro, pueden parecer geniales y misteriosos, pero Gilbert sabe con seguridad que una vez que conoces a uno, descubrirás que ¡no son todo lo que parecen! Y eso es lo que Gilbert planea hacer: encontrar a un yeti. Eso es, si puede encontrar uno... ¿Pero cómo de difícil puede ser?
El Sol ha salido y está brillando, y el pequeño vampiro Vlad está arropado en el ataúd..., pero los CHAC-CHAC, ÑEEEC y CLANC le tienen imaginándose todas las cosas aterradoras, luminosas y brillantes que hay ahí fuera. Por suerte, su mamá sabe qué debe decir para hacer que se sienta bien y que pueda descansar tranquilamente. Con un texto inteligente y lleno de ilustraciones muy detalladas, ésta es la perfecta historia para leer antes de ir a dormir para cualquier niño (o vampiro) que necesite que le aseguren que es seguro irse a dormir.