Hace un año, Amelie lo tenía todo: un novio de toda la vida, su mejor amiga de la infancia y un trabajo en el restaurante de su padre. Su vida era perfecta. Hasta que Ian se sentó junto a ella en una boda y le demostró que quizá podría apetecerle algo fuera de la carta.
Hoy, Amelie está soltera y sin trabajo, y se ha tomado un respiro de su mejor amiga. Por si fuera poco, ha perdido todo contacto con Ian. Cuando visita la ciudad de este para dar una conferencia sobre cocina, espera un gran encuentro romántico y trascendental. Sin embargo, todo vuela por los aires al descubrir que Ian es hijo del rival de su padre.
¿Puede haber un fiasco aún mayor? Él solo quiere que sean amigos. Amelie tiene una semana para hacerle cambiar de opinión y demostrarle que, pese a todo, ella es la persona indicada con la que compartir su menú de boda.
El mundo de Caleb se ha desmoronado. El tiempo transcurre, pero él sigue viviendo en esa misma noche. Sigue paralizado en ese mismo dolor. Su familia necesita que despierte. Él necesita buscarla. Y necesita encontrarla.
El mundo de Victoria se ha transformado. Intenta descubrir quién es, pero su antiguo yo sigue fragmentado en cientos de pedazos. El chico que la acompaña necesita que ella sea fuerte. Ella necesita entender por qué siente esa conexión con él. Y por qué una voz en lo más profundo de su cabeza le dice que tiene un hogar al que volver.