En el inolvidable paisaje de un hospital, un grupo de jóvenes abrazan la alegría que tienen a mano: la amistad, la libertad y la rebeldía. Cada uno de ellos está roto; cada uno de ellos se ha hecho más fuerte debido a eso.
Crean una comunidad, viven milagros, y reclaman a la vida lo que la enfermedad les ha arrebatado. Pero un corazón roto hace que uno de ellos renuncie al amor. Y aun así, en ese desolado lugar donde el amor parece imposible, se abre una puerta… y también los corazones.
¡Tengo una corona! ¡Soy el rey!». Con estas palabras, el mono que quería ser rey se impuso a todos los monos del lugar. Nadie se atrevía a contradecirle hasta que un pequeño mono capuchino de otro país vino a cuestionar esa supuesta autoridad. Un canto a la igualdad y a la justicia, una crítica a cualquier tipo de tiranía, contado con sencillez y protagonizado por personajes antropomórficos. Las ilustraciones fascinantes, tan exuberantes como la selva en la que transcurre la historia, dialogan con el texto y le dan a la historia una riqueza artística impresionante.
Como una de las humanas que acabaron en este planeta helado y, tras todo lo que han vivido, Kira debería contentarse con estar a salvo y tener un nuevo hogar. No solo ha visto que en este planeta las mujeres son respetadas y hasta atesoradas, sino que incluso un alien en particular, Aehako, ha dejado claro que está interesado en ella. De hecho, por más que Kira lo intenta, le resulta difícil mantenerlo alejado, aunque lo que en realidad quiere es agarrarlo por los cuernos e insistir en que la lleve a sus pieles.
Pero Kira tiene un terrible secreto, varios, en realidad. Y está convencida de que si Aehako supiera toda la verdad, no podría amarla. Sin embargo, hay algo si cabe más preocupante: los extraterrestres que las secuestraron están de regreso y, gracias al traductor de su oído, pueden encontrarla. Su presencia aquí pone a todos en peligro, pero ¿puede Kira renunciar a su nueva vida y al hombre que más desea? ¿Seguirá queriéndola si le cuenta sus secretos?
Caerle mal a Sasha Washington no es algo que perturbe a Torres sino que, más bien, le divierte.
En este nuevo curso, los Wolves se ven obligados a compartir su pista con el equipo de patinaje, lo que hará que las dos personas más opuestas de todo el campus coincidan en el hielo más de lo que les gustaría.
Sasha vive tras la estela de la mejor patinadora del país: su madre.
Torres necesita salvar su futuro y proteger a su familia de su padre.
Ninguno puede permitirse distracciones, pero cuando la arrogancia de Sasha choca con la actitud juguetona de Torres, todos sus cimientos parecen empezar a colapsar.
¿Dejarán que los sentimientos los distraigan del camino hacia el exito que tanto anhelan?