Greg, un joven muy peculiar, verá cómo su vida cambia cuando su madre le obliga a visitar a una chica con leucemia.
Según Greg Gaines, el secreto para salir airoso del instituto es no ser amigo de nadie pero llevarse bien con todos. Su lema es «sin amigos no hay enemigos». Solo tiene a Earl, con quien se dedica a grabar versiones terribles de sus películas favoritas.
Hasta que vuelve a ver a Rachel.
Rachel tiene leucemia, y a la madre de Greg se le ocurre la brillante idea de obligar a su hijo a que sea su amigo. Greg tiene claro que esto no va a ser una de esas típicas historias de amor entre una chica en estado terminal y un chico que de repente se enamora de ella. Pero, de todos modos, hay algo especial entre Greg, Rachel y Earl...
Cuando Rachel decida dejar su tratamiento, Earl y Greg le harán un homenaje: grabarán para ella La Peor Película de la Historia. Y Greg tendrá que dejar la seguridad de su anonimato para darle a Rachel justo el final que su historia necesita.
Dos chicas. Sus vidas cruzadas en una amistad improbable. Una lucha por sobrevivir a la guerra más devastadora.
Dos chicas de orígenes completamente diferentes se hacen inseparables durante la Segunda Guerra Mundial trabajando para las Fuerzas Aéreas Británicas. Pero en una misión de vital importancia, el avión se estrella, una de ellas es capturada por la Gestapo. Sometida a un durísimo y cruel interrogatorio, la Gestapo le concederá solo dos semanas para contar todo lo que sabe sobre el servicio de inteligencia británico. Así irá escribiendo una complicada confesión para los alemanes y así conoceremos su historia. Ha hecho un pacto: mientras dure su confesión, no será ejecutada...
¿Cuál es el mejor lugar para trazar un plan de espionaje?
El malhumorado Xiant Silver no tiene nada en común con la impulsiva Preswen Ellis.
O tal vez sí.
Cuando se quedan atascados en el elevador del lujoso edificio Obsidiana, una rápida enemistad se forma entre ellos. Sin embargo, esa extraña coincidencia los obliga a trabajar en equipo para resolver un misterio que podría cambiar la vida de ambos para siempre.
Si quieren tener éxito, deberán aprender a lidiar con sus diferencias y, en ese camino, quizás descubran que muchas veces aquello que rechazamos es exactamente lo que mejor nos complementa.