El último año de vida lúcida de Friedrich Nietzsche (1844-1900) es un año de intensa y fructífera actividad. En apenas ocho meses, de mayo a diciembre de 1888, compone siete obras memorables. Entre ellas, unas pocas semanas antes del definitivo colapso mental, redacta esta genial e impresionante autobiografía que es Ecce Homo, uno de los productos más extraordinarios dentro del género y, probablemente, el más singular de los escritos nietzscheanos. En esta espléndida pieza literaria, donde la autoalabanza y el juego irónico consigo mismo se conjugan de modo insuperable, Nietzsche nos descubre algunos de los rasgos más fascinantes de su carácter y de su vida, a la vez que relata con concisión y precisión admirables el germen, la atmósfera, el sentido de cada uno de sus libros. El tono de resonancias apocalípticas, deliberadamente provocador, con el que se anuncia aquí la inminencia de una crisis que aún sentimos cercana, constituye un reto más al lector, enfrentado al misterio de lo que la propia obra de Nietzsche representa ante el desafío del nihilismo.
Nagarjuna (ca. 150-250), filósofo indio y fundador de la escuela de la vía media, fue probablemente el pensador budista más influyente, tras el propio Gautama Buda. Su época fue abundante en discusiones y controversias filosóficas que acabaron convirtiéndose incluso en competición y espectáculo. Aun haciendo el indispensable esfuerzo dialéctico para demostrar aquello que tiene como objetivo, "Abandono de la discusión" propone el desprendimiento -ideal del sabio- de todas las creencias y opiniones que sustentaban estas pugnas, por no ser más que distracción para la mente diáfana y atenta a la que apunta la enseñanza budista. Conviene que la mente rehúya las especulaciones y atienda a los dos elementos genuinos que están en juego en samsara y de los que depende la cultura mental budista: la percepción y el deseo.
La sociedad global del siglo XXI parece más polarizada que nunca. Para algunos, los humanos estaríamos más cerca que nunca de los dioses gracias a los logros civilizatorios. Para otros, habríamos puesto en peligro la vida del planeta y los derechos fundamentales. Las culturas de la cancelación o despiertismo (wokeness) aumentan las tensiones sociales, voluntaria o involuntariamente. Desde el deporte hasta la política -incluida la guerra-, pasando por el trabajo o la educación, la persona contemporánea busca héroes de distintos bandos cuando no logra alcanzar el éxito en todas las facetas de la vida. La humanidad, como reconocimiento de la vulnerabilidad, como competencia en el arte de la compasión, es cada vez más escasa. Tras un viaje que emprenderán por un universo tecnológico y veloz que parece un campo de minas, los lectores encontrarán el retrato robot de una humanidad futura que se reencuentra con los ángeles de la tierra y de la luz en la senda de un humanismo equilibrado. Para este viaje Fernando Gil Villa construye una universitas navis, una nave compuesta de una infinidad de partes para explorar tanto lo inhumano como los posthumano en un mundo humano fracturado lleno de amenazas. Su nave se enfrenta a aquella otra que pintó El Bosco, la Narrenschiff, llena de necios y locos que a veces con optimismo y otras con pesimismo van dejando una estela de insensateces y exageraciones que amenazan el luminoso humanismo que Gil Villa defiende (R. Bartra).
Las legendarias prácticas espirituales y tradiciones mágicas de los celtas están basadas en la naturaleza, y sus elaborados rituales folclóricos se celebran en las islas británicas desde hace siglos. En el mundo actual, es fácil sentirse desconectado, pero las prácticas celtas nos ayudarán a orientarnos a través de los misterios de la naturaleza. Con las lecciones de este libro, obtendrá un mayor entendimiento de las antiguas y perdurables tradiciones de los druidas, que le permitirán redescubrir y honrar la belleza de su entorno.
Justo después de terminar La llamada, uno de los mejores libros de no ficción de los últimos tiempos, Leila Guerriero se dirigió hacia la Costa Brava tras los pasos de Truman Capote, quien escribió allí gran parte de su célebre A sangre fría.
El resultado es La dificultad del fantasma, obra de agudeza, estructura, estilo y ritmo soberbios que mezcla investigación sobre el terreno, reportaje sobre la manipulación de la memoria, diario de escritura y reflexión sobre el ejercicio de un género literario que, justamente con A sangre fría, Capote pretendió fundar. Género que Leila Guerriero ha llevado a un nivel extraordinario de rigor y excelencia.
Si hubiera tenido más tiempo, hubiera escrito una carta más corta», afirmó Pascal. Hoy lo breve nos invita, en medio de una sociedad enferma de frenesí, a detenernos: ante el epitafio enigmático de una lápida, ante el aforismo que sugiere sin decir, ante la pancarta que nos golpea con el alma de su lucha.
Una mariposa nace, vive y muere en apenas unos días. Aunque efímero, contemplamos su vuelo con asombro. Y el aleteo de sus alas, como dice el proverbio chino, «se puede sentir al otro lado del mundo». La tesis de este libro es sencilla: lo breve entraña lo profundo.