¿En qué sentido el poder es una bestia magnífica? Michel Foucault no lo piensa como un monstruo frío o un leviatán, a la manera de Nietzsche o Hobbes, sino como un conjunto de dispositivos que hay que analizar para ver cómo funcionan, qué producen, cuáles son sus discursos y sus prácticas. Ahora bien, ¿cuándo y por qué Foucault empieza a interesarse en el poder? A través de entrevistas, conferencias e intervenciones en su mayor parte inéditas o inaccesibles en español, este volumen esclarece las circunstancias políticas y las preocupaciones personales que están en el origen de los libros y de los cursos del autor, y permite situarlos en el marco de una elaboración teórica en constante mutación.
En estos escritos sólo en apariencia laterales, Foucault relaciona con claridad de síntesis los saberes y las luchas: así, por ejemplo, revisa la función de la policía, las interpretaciones del terrorismo y de la violencia política, la dinámica de los nacionalismos, la medicalización de la sociedad, la situación de las instituciones penitenciarias. De estos textos surge un Foucault muchas veces coloquial, que articula sus ideas en el cruce entre la erudición y esa cotidianidad que se desprende de los programas televisivos, de la lectura de los diarios o de los sucesos puntuales en los que ha decidido intervenir.
El criterio de selección de los textos aquí reunidos incorpora los nuevos horizontes de lectura abiertos por los trabajos de Foucault recientemente publicados. En este sentido, el presente volumen busca funcionar como un puente entre sus cursos y sus libros, así como entre sus investigaciones y la actualidad. El poder, una bestia magnífica inicia una serie abierta, que contribuirá sin duda a una mejor comprensión del pensamiento foucaultiano.
¿Hay un Foucault que no conozcamos todavía, o no lo suficiente? Los cursos en el Collège de France, impartidos entre 1970 y 1984, focalizaron la atención de lectores y especialistas en el último Foucault, preocupado por indagar una ética y una estética de la existencia en el mundo grecorromano. Este libro, y otros cursos y trabajos inéditos que irán apareciendo en esta serie, invitan a girar la mirada hacia el joven Foucault, el que entre 1949 y 1954 se gradúa en Psicología y Psicopatología, asiste al "seminario de los miércoles" de Jacques Lacan y trabaja en el hospital psiquiátrico de Sainte-Anne, al tiempo que se propone interrogar desde este campo sus inquietudes filosóficas.
En el punto álgido de la Segunda Guerra Mundial, cuatro mujeres comenzaron sus estudios en la universidad de Oxford: una católica conversa extremadamente brillante; una chica de buena familia que anhelaba escapar del asfixiante ambiente en el que había sido criada; una ferviente comunista aspirante a novelista con una lista de pretendientes más larga que su brazo, y la cuarta: una tranquila y desordenada amante de tritones y ratones que se convertiría en una gran intelectual pública de su tiempo. Se hicieron amigas de por vida. En ese momento, solo un puñado de mujeres había hecho de la filosofía su modo de vida. Pero cuando la mayoría de los hombres de Oxford fueron reclutados en la guerra, todo cambió.
Mientras Elizabeth Anscombe, Philippa Foot, Mary Midgley e Iris Murdoch trabajaban para hacerse un lugar en un mundo dominado por hombres, mientras construían sus amistades y familias, mientras se acercaban y se alejaban entre ellas, siempre defendieron que algunas maneras de vivir son mejores que otras. Las diferencias en el ámbito de la filosofía moral que marcaron sus aportaciones provocó el cambio más importante en la disciplina durante más de un siglo, reemplazando la árida escolástica por una vuelta a las discusiones sobre la bondad, la virtud y el carácter.
El emperador Marco Aurelio Antonino fue consignando en privado este ejemplo único de escritura de sí y sobre sí, enmarcado en la filosofía estoica, durante los años en los que comenzó la decadencia de Roma. Al margen de la corte, la púrpura y las convulsiones de la época en la que fue redactado este diario de mejora personal, sus hondas reflexiones apuntan a la constitución desnuda de cualquier ser humano.
En este estudio de la humanidad moderna, Hannah Arendt reflexiona sobre la dimensión activa de los seres humanos, es decir, sobre su capacidad de intervenir en el mundo por medio del trabajo, la obra y la acción. Arendt analiza tanto las capacidades humanas cuya finalidad básica es atender a las necesidades de la vida como la sublimación de estas en otra más trascendental, la capacidad de ser libres, para considerar nuestra condición a través de nuestros más recientes temores y experiencias.
El presente volumen reúne una serie de ensayos sobre cuestiones de teoría del conocimiento, metafísica, filosofía del lenguaje y de la acción, escritos por especialistas de diversa procedencia. Se abordan temas como la naturaleza del conocimiento y su relación con la voluntad, el problema del escepticismo y la realidad del mundo externo, la interpretación lingüística, la metáfora y la autoridad de la primera persona, así como la cuestión de la definición de la mentira y el engaño, el bullshit y su papel en los discursos políticos autoritarios, y las condiciones de la responsabilidad moral.