Si creías que el mundo estaba llegando a su fin, esto te interesa: vivimos más años y la salud nos acompaña, somos más libres y, en definitiva, más felices; y aunque los problemas a los que nos enfrentamos son extraordinarios, las soluciones residen en el ideal de la Ilustración: el uso de la razón y la ciencia. En esta elegante evaluación de la condición humana en el tercer milenio, el científico cognitivo e intelectual Steven Pinker nos insta a ver con otra perspectiva los titulares alarmistas y las profecías de la perdición que juegan con nuestros prejuicios psicológicos.
A LA CONEXIóN ENTRE RELATO Y FILOSOFíA, QUE CONSTITUYE LA CARACTERíSTICA MáS SOBRESALIENTE DE LOS LIBROS DE PETER SLOTERDIJK, HAY QUE AñADIR EL HECHO DE QUE A COMIENZOS DEL SIGLO XXI SE PUEDA CONTAR CON ALGO RADICALMENTE REVOLUCIONARIO.
Presentamos en este volumen una selección de ensayos en los que, con su lucidez y coraje característicos, Hannah Arendt reflexiona sobre algunos de los acontecimientos políticos más relevantes que le tocó vivir desde su salida de Alemania en 1933 hasta su fallecimiento en los Estados Unidos en 1975. El drama de los refugiados, las secuelas del régimen nazi, los orígenes de la Unipon Europea, los cinflictos raciales de los años cincuenta, la desobediencia civil de la década siguiente, el caso Watergate y el usi de la mentira en política: estos y otros asuntos son abordados por la autora, quien al mismo tiempo arroja luz sobre nuestro presente.
Francis Bacon (1561-1626) fatigó su vida y agotó su salud en el desempeño de la política (en un periodo histórico particularmente turbulento), hizo contribuciones decisivas a la ciencia (pulió el método científico hasta convertirlo en el instrumento más eficaz para conocer la naturaleza), pero su aspiración secreta fue la de vincular su nombre a la literatura. Bacon no estaba tanto interesado en la ficción o en el tratado teórico, como en una forma nueva, que había puesto en circulación Montaigne: el ensayo. Una forma libre de pensamiento sobre toda clase de asuntos, comunes a los hombres, donde la imaginación del abordaje se revela decisiva. Los Ensayos fueron durante años el orgullo secreto de Bacon y su contribución más importante a las letras inglesas. Estos textos breves y concentrados, fruto de una curiosidad disparada en múltiples direcciones (la verdad, la muerte, la venganza, la envidia y el amor; pero también el disimulo, la sospecha, la ira, la fama o la conversación; y saberes prácticos como la salud, la jardinería o las negociaciones), siguen apelándonos directamente, gracias a dos grandes virtudes que les permiten sortear el paso del tiempo: una lúcida comprensión de la naturaleza humana, y una precisión casi clínica con el lenguaje. El mundo cambia, pero las pasiones siguen aquí, y leídas con varios siglos de distancia, las palabras y las ideas de Francis Bacon (una inteligencia resuelta a pensarlo todo por sí misma) siguen interpelándonos.
UNA REIVINDICACIÓN DEL ESCEPTICISMO COMO DEFENSA ANTE LAS TIRANÍAS Y LOS FANATISMOS.
Filósofo inconformista e insobornable, Bertrand Russell publicó este conjunto de ensayos cuando ya había dado sobradas muestras de ser un intelectual revolucionario. En ellos, mediante el ejercicio de la duda escéptica, nos propone un planteamiento «paradójico subversivo»: transformar un mundo irracional a través de la razón, que es la que determina las acciones humanas. Russell aborda grandes temas como el psicoanálisis, la ciencia, la educación, la relación entre guerra y bienestar, el control de la información o la libertad individual, y los examina con una actitud escéptica, que se convierte también en una forma de independencia intelectual. El resultado es una obra que nunca ha perdido su vigencia.
No sólo los especialistas en filosofía, sino también las personas interesadas en los problemas del hombre y su futuro, recibieron periódicos testimonios de la capacidad de Bertrand Russell (1872-1970) para enfrentarse, a lo largo de su dilatada y fecunda vida, con todo tipo de cuestiones, desde las muy técnicas de la teoría del conocimiento o la filosofía matemática, hasta las de la justicia y moralidad de los regímenes políticos, de los conflictos bélicos y de los sistemas sociales. Este volumen de " Ensayos filosóficos " reúne varios escritos sobre la ética, la historia y la verdad, de los que revisten singular interés los trabajos dedicados a la exposición y análisis de las concepciones acerca de la verdad y falsedad tal como fueron expuestas por William James, y a la crítica general del pragmatismo.
Este volumen incluye más de veinte de los ensayos literarios más importantes de C. S. Lewis, escritos entre 1932 y 1962.
El autor trata de poesía, teatro o novela, mientras recorre la obra de autores como Austen, Shakespeare, Walter Scott, Eliot, Chaucer o Kipling, Donne, Shelley o William Morris. Y lo hace con el ingenio, la franqueza y la erudición que caracteriza su mejor escritura crítica.
Si bien David Hume (1711-1776) suele ser conocido y valorado principalmente por su obra filosófica, él se consideró siempre un escritor y como tal destacó entre sus contemporáneos. Su amplio abanico de intereses y sus vastos conocimientos le llevaron a ocuparse en sus obras de carácter moral -en su sentido etimológico: referido a las 'costumbres' o 'hábitos'- de cuestiones más humildes, pero a menudo presentes en la vida cotidiana (los caracteres, la superstición, la avaricia, el divorcio, la conformidad...), que iluminó con su experiencia y un buen juicio excepcional. En esta selección de sus Ensayos morales, todos ellos de amena lectura, Hume se revela como un pensador muy adelantado a su época que defiende, por ejemplo, un matrimonio basado en la igualdad, o bien opiniones en torno al suicidio y la inmortalidad del alma muy discordantes con el sentimiento religioso común en su época.
Las obras que en vida dieron fama como escritor a David Hume no son las mismas que con posteridad han consolidado su reputación como filósofo. Entre las primeras se cuentan estos Ensayos, cuya preparación y revisión ocupó a Hume durante toda su vida adulta hasta su muerte, a lo largo de sucesivas ediciones, corregidas y ampliadas personalmente por él. Las palabras de su amigo John Holme resumen bien el interés de esta obra: «Sus Ensayos son a la vez populares y filosóficos; en ellos se unen, de una manera rara y feliz, la profundidad científica y el buen estilo literario».