Una nueva visión transversal de cómo la idea de Occidente ha moldeado nuestra historia, contada a través de la vida de catorce personajes históricos fascinantes.
Tendemos a pensar en la civilización occidental como un recorrido dorado a través de los siglos, desde la Antigüedad clásica hasta los países del Occidente moderno. La arqueóloga clásica Naoíse Mac Sweeney, no obstante, considera que este concepto no es más que el producto de nuestra imaginación.
En Occidente, Mac Sweeney desafía nuestra percepción de este concepto, desmonta los mitos sobre su historia y ofrece una nueva explicación de sus orígenes y desarrollo a través de catorce vidas: desde el refugiado mestizo Heródoto hasta Phillis Wheatley, una mujer afroamericana esclavizada que se convirtió en autora; pasando por el primer ministro británico William Gladstone y su pasión por la poesía épica, hasta el erudito árabe medieval Al-Kindi.
Así, Mac Sweeney mezcla héroes anónimos con rostros conocidos para ofrecernos otra perspectiva y revelarnos cómo se ideó esta versión de la historia, cómo se ha utilizado para justificar el imperialismo y el racismo y por qué es una ideología caduca.
En estos momentos de redefinición de la civilización, si queremos trazar un futuro para nuestra sociedad, debemos comprender adecuadamente su pasado. Occidente es una historia cautivadora e íntima que cambiará la forma en que vemos el mundo que nos rodea.
Ralph Waldo Emerson fue en su tiempo y será por siempre una fuente de inspiración infinita. Adalid de la autoconfianza y de la adopción de un sentido de felicidad moral, es ejemplo inigualable de fraternidad y humanismo. Todo ello se percibe leyendo su monumental diario y su libro Naturaleza, manifiesto del trascendentalismo, su ponencia «El escolar americano», pionera en unos Estados Unidos en proceso de forjarse una cultura propia, y su discurso en la Facultad de Teología de Harvard en el que criticó la religión institucionalizada.
Esta conducta valiente y su filosofía optimista atraviesan, de forma vívida y emocionante, Ojos llenos de alegría, un ensayo en el que Toni Montesinos aborda la vida y obra del considerado fundador de las letras norteamericanas, que tanto influyó en autores como Henry David Thoreau, Walt Whitman o Louisa May Alcott. Un hombre heroico y familiar, que una época marcada por la política, la esclavitud y la guerra, se comprometió con la búsqueda intuitiva de la verdad, servir al prójimo y hallar lo divino por doquier y en el interior de cada ser humano.
«Me pasé un año en Berlín explorando las vidas de mi abuelo y mi padre: Kurt Wolff, apodado ?quizás el editor más exigente del siglo xx? por The New York Times Book Review, y su hijo Niko, que luchó en la Wehrmacht durante la Segunda Guerra Mundial antes de venir a América.
Basándome en cartas familiares, fotografías y diarios nunca antes publicados, Páginas de vuelta a casa, narra los viajes de estos dos hombres nacidos en Alemania que se convirtieron en ciudadanos estadounidenses, a la vez que es mi oportunidad de contar una historia familiar íntima; un entramado de los peligros, los triunfos y los secretos de la historia y el exilio, con resonancias en la actualidad.»
Durante el año académico 1960-1961, Jacques Derrida, entonces asistente de filosofía general y lógica en La Sorbona, lleva a cabo una lectura de la frase de Alain: «Pensar es decir no».
Este curso magistral de cuatro sesiones muestra ya los signos de la escritura deconstructiva que estaría por venir. En él, Derrida desmonta qué queremos decir cuando decimos «sí» o «no», además de formular y plantear por primera vez el binomio «sí no», elemento básico y originario del acto de pensar.
Frente a este texto, se tiene la impresión de estar ante cuestiones fundamentales del pensamiento de Derrida, que aún hoy conservan su relevancia en una época en la que a menudo resulta difícil distinguir entre pensamiento y creencia.
Redactado a mano por Derrida durante la guerra de independencia de Argelia, y hasta ahora inédito, Pensar es decir no es el texto más antiguo del corpus derridiano que ve la luz gracias a una importante labor editorial.
Más que un libro esto es una conversación a modo de propuesta de amistad, con siete disquisiciones que inciden en el mundo actual sobre asuntos como liarse la manta a la cabeza, la seducción de los personajes malos, usar la imaginación propia para entender la ajena, el rencor y la fortuna, los cataclismos medioambientales, las pequeñas heroicidades del día a día, los colores que pintan nuestra existencia o el sentido de la vida como historia que escribimos entre todas las personas, a veces sin querer.
Pequeñas heridas mortales se despliega como antorcha que ilumina la caverna moderna y nos sitúa ante siete reflexiones plagadas de alusiones a la ciencia y a la conducta humana, pero siempre con la filosofía y la literatura como brújulas para desvelar el sentido de las cosas y de la vida. Gopegui despliega el cometido del conocimiento, que como luz ilumina nuestros refugios, conduciéndonos por mil y un mapas a diversas escalas de la intelectualidad y con el innegable compromise ético y politico que baña sus novelas.