«Ten valor para ser feliz».
El pontífice nos propone en estas páginas quince pasos concretos para alcanzar la felicidad, pero no se trata de la que nos ofrece el mundo, sino de aquella permanente y eterna que viene de Dios. «El camino de Jesús siempre conduce a la felicidad. Siempre». Como él mismo explica: «Hemos sido creados para una felicidad más grande», y a través de sus palabras nos anima a salir de nuestra zona de confort, de miedo, de tristeza, para soñar en grande, para vivir plenamente nuestra vida aprendiendo a levantarnos tras los fracasos y a caminar de la mano de los demás: «En el arte de caminar lo que importa no es no caer, sino saber levantarse».
Es un libro en el que no solamente se combinan distintos mensajes del papa Francisco a lo largo de los años sobre lo que es la verdadera felicidad, sino que estos se intercalan con citas de los libros, autores y películas que han marcado su vida, entre ellos, san Agustín, Chesterton, Dostoievski, san Juan de la Cruz, Tolkien, Octavio Paz y muchos más. Además, nos invita a adentrarnos en las bienaventuranzas para salir de nosotros mismos y vivir en comunidad y para los demás, para atrevernos a ser más, para tener el valor de ir a contracorriente, de no darnos por vencidos y de no caer en quimeras que nos llevan hacia una falsa felicidad: «No tengáis miedo de arriesgaros, sino de vivir paralizados».
Somos seres entretejidos de relatos, bordados con hilos de voces, de historia, de filosofía y de ciencia, de leyes y leyendas. Por eso, la lectura seguirá cuidándonos si cuidamos de ella. No puede desaparecer lo que nos salva. Los libros nos recuerdan, serenos y siempre dispuestos a desplegarse ante nuestros ojos, que la salud de las palabras enraíza en las editoriales, en las librerías, en los círculos de lecturas compartidas, en las bibliotecas, en las escuelas. Es allí donde imaginamos el futuro que nos une».
Un libro inspirador de una de las figuras más emblemáticas de la política contemporánea.
«Hace algunos años, cuando Mujica fue electo presidente de Uruguay, el mundo descubrió a un político distinto. Vivía con muy poco, decía lo que pensaba y se expresaba más como un filósofo que como un ex guerrillero reconvertido en político.
Desde muy joven se involucró intensamente en el activismo de un partido tradicional, vivió la década de los años sesenta desde la trinchera revolucionaria, pasó los setenta en la más oscura de las catacumbas de la dictadura y en los noventa participó en el crecimiento y triunfo de las izquierdas hasta llegar a ser presidente de su país.
Mujica ha culminado su gobierno con altos índices de popularidad, resultados económicos y sociales elogiados en todo el mundo y medidas puntuales que pasarán a la historia. Lo ha hecho conjugando dos realidades antitéticas: una concepción ideológica y un estilo de vida anarquista, con el cargo de presidente, que concentra el mayor poder del estado.» - Allan Percy
El autor pone al descubierto una documentación secreta –clasificada como top secret por el Pentágono– con nuevos y sorprendentes datos sobre la figura y la obra de Jesús de Nazaret. Las revelaciones que aporta son tan rigurosas como desconcertantes.
¿Cómo se alcanza el poder?
¿Cómo conservarlo?
El poder puede cambiar de forma o pasar de manos, pero siempre está ahí.
Nicolás Maquiavelo escribió El príncipe pensando en los gobernantes de su tiempo, pero, como el coronel Pedro Baños nos revela, sus ideas se pueden aplicar a lo que hoy llamamos líder, ya ejerza sus funciones en la política, en el terreno militar, en la empresa o incluso cuando se trata de un liderazgo social.
Este sagaz diálogo que Pedro Baños mantiene con Maquiavelo a través de los siglos nos permite entender las maneras de obtener el poder, cómo ganar la confianza y el respeto de los ciudadanos, la importancia de las alianzas y la prevención no solo ante los enemigos declarados, sino también ante los propios amigos. Aunque los líderes actuales deben adaptarse a un mundo complejo, no les conviene olvidar los aciertos y errores del más prestigioso influencer de todos los tiempos: Nicolás Maquiavelo.