Es en la cima de una montaña de los Alpes donde una angustia inexplicable, casi irracional, se apodera de la respiración de Luiz Schwarcz, bloqueando su garganta en el momento en que más necesitaba el aire. En ese preciso instante nace la decisión de escribir este libro, El aire que me falta, que engloba el proyecto que el autor había alimentado durante años: escribir la historia de su padre, de su familia, que lo abandonó todo para escapar del terror nazi, y cuyo peso ha ido cargando Schwarcz toda su vida.
En estas memorias, armadas sobre una estructura en espiral, metáfora perfecta para representar las vueltas que damos alrededor de nuestros traumas, el autor alterna recuerdos para construir un sensible y detallado relato sobre cómo la depresión y los traumas, propios y heredados, pueden dejar sin aliento a cualquiera y seguir latentes en existencias marcadas aparentemente por el éxito. Cómo podemos quedarnos sin aire y volver a respirar.
*Premio Princesa de Asturias de Ciencias Sociales 2024*
A través de los recuerdos de sus abuelos (el conde Paul Ignatieff y la princesa Natasha Mestchersky), las fotografías con grano de sus distinguidos antepasados, las reliquias, los diarios y los relatos familiares transmitidos de generación en generación, Michael Ignatieff emprende un conmovedor viaje para reconciliarse con su herencia, ligada a la violenta y tumultuosa historia de Rusia.
Con gran cuidado y complejidad, reconstruye un modo de vida desaparecido. Desde la opulenta corte de Catalina la Grande, traza el ascenso de su familia hasta alcanzar una gran influencia en el régimen imperial del zar Nicolás II antes de que el país se viese arrastrado por la revolución, la guerra civil y el exilio. El álbum ruso es una exploración sobre cómo nuestro pasado nos moldea, pero también sobre cómo debemos escribir nuestras propias historias en el presente.
El algoritmo de la incertidumbre descifra los códigos invisibles que operan en nuestra sociedad y desentraña algunos de los mecanismos que han impuesto las grandes empresas al sistema educativo, a la política y a la cultura.
El resultado es una obra que presenta algunos de los grandes dilemas de nuestra época y ofrece propuestas para el mundo que viene, en el campo de la educación postdigital, la plataformización, la educación mediática y el futuro de las democracias. No es una obra sobre algoritmos ni sobre matemáticas, sino que ofrece, desde la metáfora, desmitificar la concepción de la realidad actual. No existe el algoritmo del amor, ni el algoritmo de la paz, y tampoco el de la incertidumbre. 37 autores en 24 capítulos que operan como si fueran algoritmos, ofrecen las claves para entender algunos aspectos de este mundo incierto.
El algoritmo de la incertidumbre propone un viaje al lector desde una doble experiencia, combinando texto convencional con códigos QR.