Enseñar es una actividad inteligente y hermosa. Es ayudar a otros a descubrir el conocimiento. El Maestro inolvidable trabaja en favor de los alumnos, se enfoca más en los estudiantes que en el contenido. Jesús te ha dejado las herramientas necesarias para desarrollar una labor o ministerio de excelencia. Como maestro (a) debes comprometerte con tu crecimiento en todas las áreas.
Busca a Dios en oración, actúa con justicia, trata de ser confiable y mantenerte actualizado, no olvides manifestar una actitud positiva, recuerda que una sonrisa logra maravillas, nunca te rindas por más difícil que sea la situación.
La historia de la mujer que se enfrentó a Facebook y cambió la forma de entender las redes sociales
En septiembre de 2021, el Wall Street Journal publicó una exclusiva que sacudió al mundo: Facebook tenía conocimiento de los graves efectos nocivos que provocaba en la sociedad, pero no le interesaba remediarlo. Un mes después, la responsable de filtrar los archivos confidenciales que lo probaban salió del anonimato.
Se trata de Frances Haugen. La joven extrabajadora de Facebook acusó a la compañía de Mark Zuckerberg de anteponer sus beneficios económicos al bienestar y la seguridad de sus usuarios. Haugen dejó la empresa en mayo de 2021, pero no sin antes haber recopilado decenas de miles de documentos internos que fueron bautizados como los «Papeles de Facebook».
En su testimonio ante el Senado de los Estados Unidos, la informática expuso cómo la plataforma –hoy llamada Meta– ignoró los informes e investigaciones que alertaban del impacto negativo de su tecnología en la sociedad.
Un relato íntimo cargado de lúcidas reflexiones sobre lo que significa envejecer.
Actualmente cumplir años se ha convertido en una desgracia o, como mínimo, en un proceso que la sociedad rechaza y silencia. Frente a esta realidad, esta hermosa obra nos revela no solo los estereotipos y prejuicios que rodean la edad madura, sino el valor que pueden tener el sentimiento de finitud y la experiencia de lo vivido.
Entremezclando experiencias personales, anécdotas y referencias a autores como Herman Hesse, Annie Ernaux, Elias Canetti, Marguerite Duras, Virginia Woolf, Roland Barthes y un largo etcétera, este libro nos muestra que, si sumar años está visto como una fatalidad, saber envejecer es una posibilidad e incluso un privilegio. No hay duda de que la vejez supone una aceptación, tal vez un desdoblamiento de uno mismo —te ves distinto de lo que has sido—, pero esta aceptación pasa por mantener el deseo de vivir.
La viajera de noche no es una guía para envejecer bien, es un grito contra la invisibilidad y el rechazo a los que se exponen los viejos y, sobre todo, las viejas, así como una invitación a oponerse a la exigencia de la sociedad contemporánea de que nos hagamos mayores en silencio y de forma disimulada. Como dijo Simone de Beauvoir: «La vejez es una cuestión de civilización. ¡Continuemos con la batalla!».