Mediante las iniciativas personales de mujeres excéntricas, desafiantes, únicas, Londres ha sido y sigue siendo un lugar donde los libros tienen vida propia y sus libreras, una manera más libre de estar en el mundo. Este libro aborda la historia de más de una treintena de libreras y de sus establecimientos en el Londres de los últimos dos siglos. Recorremos la mítica Charing Cross Road, donde abrieron sus librerías las sufragistas y la apodada «reina roja de Charing Cross Road», Christina Foyle. Sin duda, la historia de Alida Klemantaski y la londinense The Poetry Bookshop nos recuerda que las librerías que hoy consideramos modernas ya contenían todas sus «originalidades» hace un siglo. De la mano de la filántropa Florence Boot (de la icónica droguería Boots), la fulgurante Nancy Mitford o la misteriosa E. Millicent Sowerby, conocemos algunas de las historias más interesantes del siglo xx hasta llegar a nuestros días, con las iniciativas de Ann Devers y Dee Creative. Pero además, sus capítulos —que pueden leerse sin necesidad de seguir un orden, aunque están concebidos de manera cronológica— son también una breve historia de los negocios de compraventa y edición de libros en la capital inglesa desde el punto de vista de las mujeres que han participado en él.
Los hechos aquí recogidos son una prueba de cómo una industria cultural ha logrado sobrevivir gracias a la permanente presencia de las mujeres y al apoyo entre ellas. En realidad, ofrecen la reescritura de una historia en la que no han visto reconocido —salvo honrosas excepciones— el lugar que les corresponde.
¿Quiénes son los fascistas? ¿Sigue vivo el fascismo?
En los últimos años ha tenido lugar un resurgir y una popularización del término «fascista» para conceptualizar fenómenos políticos más bien recientes, como el crecimiento de los partidos de ultraderecha y la consagración de las «democracias iliberales».
Sin embargo, lo que un día fue un adjetivo calificativo que designaba una realidad muy concreta de la Europa de entreguerras, hoy en día se emplea como epíteto descalificativo de forma muy laxa y para denigrar al adversario político.
En este libro, dos historiadores expertos en las guerras y dictaduras del siglo pasado desgranan las nuevas narrativas que estructuran el debate político contemporáneo y estudian si la revitalización de los fenómenos políticos nacionalistas y xenófobos se corresponde realmente con el contexto originario en el que tenía sentido usar el término fascista.
Ellos, los fascistas proporciona al lector no especializado herramientas analíticas y conceptuales desde la historiografía y la ciencia política para entender qué fue realmente el fascismo y si es posible que vuelva a tener lugar en nuestra época.
Una obra imprescindible para diseccionar y comprender el concepto de moda en España y Europa durante la última década, y para estar vacunados frente al empleo torticero de la terminología política.
Tras su extraordinaria biografía de Steve Jobs, el nuevo libro de Walter Isaacson cuenta la fascinante historia de las personas que inventaron el ordenador e internet; Los innovadores está destinado a convertirse en la historia definitiva de la revolución digital y en una guía indispensable para entender cómo sucede realmente la innovación.
¿Qué talentos y habilidades permitieron a algunos inventores y empresarios convertir sus ideas visionarias en realidades disruptivas? ¿De dónde vinieron esos saltos creativos? ¿Por qué algunos triunfaron y otros fracasaron?
En esta magistral saga, Isaacson arranca con Ada Lovelace, la hija de lord Byron, una pionera de la programación informática en la década de 1840. Además, presenta a las extraordinarias personas que crearon la revolución digital que nos rodea, gente como Vannevar Bush, Alan Turing, John von Neumann, J.C.R. Licklider, Doug Engelbart, Robert Noyce, Bill Gates, Steve Wozniak, Steve Jobs, Tim Berners-Lee o Larry Page.
Esta es la historia de cómo funcionan sus cerebros y por qué han sido tan inventivos, pero también de cómo su capacidad para colaborar y dominar el arte del trabajo en equipo les hizo aún más creativos.