Mariana Zuvic es nacida y criada en Río Gallegos, Santa Cruz. Conoció a Néstor y Cristina desde muy pequeña porque eran amigos de sus padres. Todo comenzó a cambiar -así lo narra en este libro- cuando el matrimonio Kirchner dio un giro a los parámetros morales con los que se movían en esa pequeña ciudad patagónica. Santa Cruz fue el laboratorio del modus operandi de hacer política que luego trasladaron a la Nación.
Nunca antes alguien había narrado en primera persona la intimidad del origen de esas "prácticas de destrucción institucional, descomposición social y corrupción que llevaron a los ciudadanos a transformarse en rehenes de la lógica amigo-enemigo", según cuenta Zuvic. Método que ejercieron como abogados, en la intendencia, en la gobernación de la provincia y del país.
El origen cuenta esa parte oculta de la historia reciente, lo que sucedió cuando Néstor y Cristina eran dos desconocidos para la mayoría de los argentinos. La investigación incansable de Mariana Zuvic junto a Elisa Carrió -que prologa este libro- fue determinante para llevar a la justicia las denuncias por malversación de fondos públicos del gobierno kirchnerista. Su historia es clave para entender qué pasó -y pasa- en Santa Cruz y en la Argentina desde hace treinta años.
«Las historias importan. Importan muchas historias. Las historias se han utilizado para desposeer y calumniar, pero también pueden usarse para facultar y humanizar. Pueden quebrar la dignidad de un pueblo, pero también pueden restaurarla.»
Eugenio o proclamación de la primavera, novela plena de violencia e idealismo, constituye el canto a una juventud considerada heroica y llamada al sacrificio, tanto si esos jóvenes llevaban camisa azul u ondeaban rojas banderas. Para entenderlo con nuestra mentalidad actual, hay que conocer las circunstancias que engendraron el fenómeno y las lecturas que alimentaron a una generación autopredestinada a luchar sin cuartel en los campos de batalla de la piel de toro por considerar que las opciones intermedias, democráticas, habían cumplido indecorosamente su ciclo y debían dejar paso a soluciones extremas, buscando atajos que en la Historia suelen desembocar en precipicios.
Una obra que renace del olvido y se enriquece con unas ilustraciones oníricas que buscan aliviar sus más duros pasajes.