¿Quién decide lo que consideramos verdadero? ¿Quién da forma a la construcción de los hechos? Para Solnit, nos encontramos en medio de una batalla por el dominio de la narrativa en la que los poderosos intentan aferrarse a sus antiguos privilegios, pudiendo justificar la violencia para defenderlos, y otras voces minoritarias —las mujeres, las personas racializadas, y todos aquellos que están al margen del poder— luchan por hacerse hueco en el elenco de la verdad. A partir de movimientos como el #MeToo y el Black Lives Matter, o casos como el de Harvey Weinstein, Rebecca Solnit, «una de las pensadoras más influyentes de nuestro tiempo» (Público), analiza este cambio de paradigma, señalando sus triunfos y sus fallos, y abogando por la democratización de las nuevas ideas y los nuevos lenguajes como forma de resistencia.
El testimonio emocionante, descarnado y divertido de una mujer en busca del amor y la estabilidad emocional.
Christine Tate es una estudiante brillante, ha vencido un trastorno alimentario y tiene la vida por delante. Y se siente sola, tanto que cree que morir es la única salida para ponerle fin a esa soledad. Busca ayuda y llega hasta un psicólogo que la empuja a comenzar terapia en grupo para compartir sus problemas con otras personas que a su vez harán lo mismo con ella. De esta manera, si uno es honesto y deja de lado los secretos, establecerá relaciones reales y privadas en las que no podrá esconderse. Así comienza la andadura de Christine en los grupos de terapia. Porque para confiar en uno mismo, hay que confiar también en los demás.
Pedro Martínez de Luna, Benedicto XIII, el Papa Luna. Tres formas diferentes de nombrar a un mismo personaje que ha pasado a la historia como la obstinación personificada por la firmeza de sus convicciones frente a Roma. Pocos conocen la verdadera dimensión de quien realmente urdió la unificación territorial de España que vería la luz con los Reyes Católicos. Una figura intelectual, política, religiosa e incluso guerrera (porque la guerra, como en cualquier otro mandatario del siglo XV, sería fundamental en su pontificado) en cuyo pensamiento y en cuya obra observamos la estela del proyecto que la Orden del Temple diseñó para la cristiandad occidental.
Custodio del santo Grial, poseedor de toda una armada naval, precursor de los Borgia y valedor de los Trastámara, Benedicto XIII protagonizó la apasionante historia de la resistencia del papado de Aviñón frente a Roma durante el Cisma e hizo de la villa castellonense de Peñíscola el centro de las miradas de España y del mundo. Su personalidad, su profundo ideal y sus dotes estratégicas lo convirtieron en una temible amenaza para sus adversarios (a los que fue viendo morir uno a uno hasta Martín V) y en un nombre familiar y popular entre las gentes. Su legado, hoy difuminado, se expande por mil senderos y lo dibuja, junto con las crónicas, como el personaje quizá más determinante de la Baja Edad Media en todo Occidente.