Eran años de gloria. París vivía la mayor concentración de talentos filosóficos por metro cuadrado que haya conocido en el siglo XX. ¿Qué fue de todo aquello? El 68 fue un sueño europeo de dos décadas. Al despertar, el mundo apareció, como siempre, irreparable.
Llego al tramo final de mi vida con la constancia de haberme equivocado en todo. Lo importante. Y la imposibilidad de borrarlo de mi memoria.
En tierra de nadie, las memorias intelectuales y afectivas del filósofo Gabriel Albiac, da testimonio del fin del mundo que acontece en cada generación, del punto final a tantas ilusiones, espejismos y grandes proyectos transformadores. Paseando entre libros y viejas consignas estudiantiles, rememorando a maestros como Althusser y Foucault o apostillando algunos de los horrores del siglo XX, Albiac expone sin lenitivos su verdad vivida, que es filosofía de la pérdida, y sin pretenderlo nos presta su ejemplo para afrontarla.
La historia contemporánea de América Latina se ha caracterizado por una intensa transformación en sus formas de gobierno. Mediante un fino estudio comparativo entre los regímenes democrático y dictatoriales que se han experimentado en esta región (a partir del siglo XX), Scott Mainwaring y Aníbal Pérez-Liñán realizan una exhaustiva investigación que da cuenta de la emergencia, subsistencia y declive de estas formas de gobierno. Tomando como referencia la centralidad de los actores políticos para explicar estos cambios, pues en gran medida moldean la percepción cultural de las formas de gobierno que resultan deseable, los autores incorporan la dimensión regional e internacional del fenómeno. Si bien queda claro lo diversa que resulta América Latina como región, Mainwaring y Pérez Liñán emprender una ardua tarea para analizar la misma sin perder aquellos aspectos distintivos y heterogéneos que la caracterizan, pero que a su vez nos permiten comprenderla.
Gilbert Keith Chesterton (1874-1936) postula en sus obras la idea de una sociedad más justa moral y políticamente, de una utopía alejada de la ingeniería social. Aunque la verdadera perfección no es alcanzable en este mundo y ningún orden político puede traer el paraíso a la tierra, sí es posible mitigar el mal y el dolor por medio de un orden político más justo mientras buscamos la verdadera salvación del alma. El sueño utópico de G. K. Chesterton aspira a recuperar el significado normativo de la utopía tal y como la formuló este autor a través de su pensamiento imaginativo y de sus célebres paradojas.