En este libro el lector encontrará una serie de aproximaciones a algunas de las cuestiones problemáticas de la actual realidad iberoamericana y de su historia política y cultural: desde la protección de la víctima en las constituciones y en cada uno de los derechos internos, hasta el Derecho penal de menores, pasando por las políticas de la memoria, el lenguaje constitucional o la construcción de la paz. Todas estas cuestiones se han agrupado en torno a los siguientes ejes: testigo/testimonio; memoria/historia; víctima/victimario; y , por último, derecho/políticas.
Las semblanzas de Martí y Gómez que publica don Mario Rivadulla se construyen sobre el tejido humano, ético, patriótico y político que dio origen a la independencia cubana bajo las ideas y el apostolado de José Martí, y con la estrategia y la fiereza en el campo de batalla de Máximo Gómez.
La obra destaca la importancia que dio siempre Martí a la República Dominicana en sus planes independentistas. El apóstol no solo buscó aquí al guerrero que necesitaba para impulsar la guerra cubana contra el dominio español, sino que se internó en nuestra realidad, forjó amistades y creó, en fin, una ligadura casi sublime con la dominicanidad.
Luego de la firma del Manifiesto de Montecristi, Martí se embarca rumbo a Cuba junto con el general Gómez, y mes y medio más tarde, cae Martí herido de muerte. A partir de entonces, la epopeya la concluyó el general Máximo Gómez y el vínculo domínico-cubano quedó sellado para siempre.
En Santo Domingo en 1902, Gómez dice: “Cuanto hice en Cuba, como humilde y devoto soldado de la libertad, lo hice a nombre del pueblo dominicano, cuyas miradas estaban fijas en mí”. Y don Mario agrega que “sin la decisiva presencia dominicana en las primeras y bisoñas filas rebeldes, es probable que la Guerra de los Diez Años hubiese abortado en sus mismos comienzos”.