Desde su antiguo trasfondo mítico, los héroes son los protagonistas de la gran literatura griega. Aquí Carlos García Gual nos ofrece una original aproximación a esas figuras heroicas a través de los diversos géneros literarios: desde la épica homérica a la novela helenística. A lo largo de muchos siglos, pues, desde la épica a la tragedia y a la comedia y más allá, la imagen heroica se va presentando con nuevos rostros, en una deriva muy significativa que va desde su mítico esplendor hasta su crepúsculo en las parodias cómicas y las novelas de amor y aventuras.
El autor analiza ese desgaste progresivo del prototipo heroico, mediante impactantes ejemplos, como un reflejo del devenir histórico de la sociedad griega y de sus ideales y aspiraciones. Si las figuras magnánimas de los grandes héroes tienen ya en la épica una emotiva humanidad, el teatro ahonda en sus peripecias trágicas.
La deriva de los héroes en la literatura griega ofrece una perspectiva lúcida, sugestiva y apasionante, sobre uno de los grandes temas de la cultura helénica y su evidente resonancia histórica. García Gual vuelve aquí a evocar el mundo heroico griego y sus textos inolvidables.
Esta obra presenta problemas económicos, políticos y sociales que no han sido resueltos y cuyas lacras continúan reflejándose frecuentemente en los medios de comunicación contemporáneos. Realiza una aproximación al activismo social y político que se está manifestando actualmente en la esfera pública. Al mostrar de forma explícita el desencanto imperante en el ámbito laboral, social y cultural, los numerosos colectivos y plataformas emergentes se aúnan con el propósito común de realizar transformaciones en el sistema estructural del país, contribuyendo a combatir y erradicar el fuerte oleaje de injusticias que golpean a diario nuestra sociedad.
Los milicianos jiguaniseros se dispusieron a la lucha, y los hechos se desencadenaron. (…) Al llamado del Movimiento, el municipio de Jiguaní respondió con un alzamiento masivo de sus milicias como apoyo a la Huelga.
Entre los méritos del libro resalta su gran realismo, lo cual aumenta el valor testimonial de la obra, que es una contribución al conocimiento de la historia de nuestra nación. Fueron aquellos días, los de Baire, Contramaestre, Maffo, Jiguaní y todos los rincones del municipio, los que hicieron honor a su inmarcesible pasado mambí. «Sangre y dolor de abril. Jiguaní, 1958», apunta al valor ideológico que debe tener todo documento revolucionario. En él vemos cumplida la tradición literaria de mostrar la literatura de campaña para perpetuar la memoria histórica.