La bombilla, durante mucho tiempo símbolo del progreso, debe apagarse. Es necesario abrazar la oscuridad para asegurar un futuro brillante. ¿Cuánta luz es demasiada? La flora y la fauna del mundo han evolucionado para operar en el ciclo natural del día y la noche. Sin embargo, la iluminación permanente ha hecho que la contaminación lumínica sea un grave problema. Desde el espacio, nuestro planeta brilla intensamente 24 horas al día, los 7 días de la semana. Al extender nuestras horas de luz, hemos expulsado a los habitantes de la noche e interrumpido los ritmos circadianos necesarios para el sustento de todos los seres vivos. Las farolas y los letreros de neón de nuestras ciudades están alterando ecosistemas enteros. Johan Eklöf nos anima a apreciar la oscuridad natural y sus beneficios únicos con un apasionante relato sobre el efecto dominó del daño que infligimos al mantener las luces encendidas: insectos que no logran reproducirse, aves cegadas y desconcertadas, murciélagos hambrientos mientras esperan en vano a insectos que solo salen en la oscuridad... Y nosotros, los humanos, podemos encontrar que nuestras hormonas, peso y salud mental se ven afectados.
Un hombre que criticó con ingenio las injusticias y vivió aventuras insólitas para su época.
Durante el primer tercio del siglo XX, pocos personajes disfrutaron del éxito y la popularidad de Luis de Oteyza (1883-1961). Reconocido escritor de viajes, novelista de aventuras, poeta, diputado y diplomático, el punto álgido de su fama lo debió a su particular manera de ejercer el periodismo. Así, contradiciendo el maniqueísmo informativo propio de las guerras, en agosto de 1922 se desplazó hasta Marruecos para entrevistar al principal enemigo de España: Abd el-Krim, el líder de la revuelta rifeña cuyas tropas habían humillado al ejército español en el conocido como Desastre de Annual.
Carne de Zen. Huesos de Zen es un clásico de la literatura budista zen de todas las épocas. Citado como un texto fundamental e imprescindible por todos los grandes maestros, recoge una antología de 101 historias donde se narran episodios y experiencias de Maestros zen a lo largo de cinco siglos.
Este zen de los antiguos se considera tan puro que su recuerdo se ha conservado como un tesoro a lo largo de los años. He aquí —como recoge la anécdota de Bodhidharma en el prólogo— la piel, la carne y los huesos del zen, pero no su tuétano, que nunca se encuentra en las palabras.