¿Qué significa, desde el punto de vista filosófico, musical e histórico, hablar de la música en términos de «obras»? Lydia Goehr propone de forma elegante y persuasiva una respuesta, describiendo cómo el concepto de obra musical cristalizó plenamente en torno a 1800, y posteriormente definió las normas, expectativas y pautas de comportamiento que han llegado a caracterizar la práctica de la música clásica. En el contexto de un relato filosófico más general sobre el auge y la decadencia de los conceptos y los ideales, y de sus funciones normativas, Goehr aborda también los debates entre directores de orquesta, intérpretes de música antigua y músicos de vanguardia.
Este libro es una de las principales contribuciones al campo de la filosofía de la música en los últimos cincuenta años. La presente edición revisada incluye un nuevo ensayo introductorio de la autora y un provocador prólogo de Richard Taruskin.
Este libro relata la odisea del pensamiento filosófico y científico del siglo XX, con sus principales aventuras y conquistas. El destino de la filosofía occidental en el siglo XX es el tema principal y más extensamente aquí considerado. Las dos primeras partes que lo abordan van precedidas de amplias introducciones panorámicas, cuyo propósito es suministrar al lector, como primera aproximación, una rápida visión global que le permita profundizar luego en los temas de su preferencia. Además de seguir este criterio de hipertexto, las obras clave de los principales filósofos son tomadas como elementos básicos o sillares del saber transmitido, de manera que el lector puede disponer de microensayos o informes especiales sobre prácticamente todos los libros de filosofía más importantes del pasado siglo. Las contribuciones de la tercera parte, dedicada al desarrollo de la lógica y la matemática y de las ciencias de la naturaleza y de la sociedad, han sido principalmente elaboradas por hombres de ciencia. Todos ellos han hecho expresamente el esfuerzo de dirigirse a un lector de cultura media que sepa más de letras que de ciencias. La razón de incluir como cuarta parte separada el pensamiento español ha sido el deseo de facilitar así mejor su conocimiento a las jóvenes generaciones de nuestro país. En la quinta parte se aborda el inexcusable estudio del pensamiento actual de las culturas no occidentales. Figuras contemporáneas como Gandhi o Mao, en uno u otro sentido, han transformado el mundo.