Presentamos en este volumen el principal escrito en el que Raymond Aron cuestiona a fondo la concepción del liberalismo ofrecida por Friedrich A. Hayek, con cuya obra nuestro autor mantuvo a lo largo de las décadas una relación que combina la admiración sincera y la distancia crítica, y en la que las discrepancias atañen a la definición misma de la libertad, a la primacía concedida a la economía y, por último, la manera de concebir la democracia.
El texto de Aron se acompaña de un prólogo en el que Gwendal Châton nos ofrece una lectura cruzada de los principales trabajos de ambos pensadores, y arroja así luz sobre una disputa entre dos corrientes del liberalismo difícilmente conciliables, la cual, lejos de estar zanjada, continúa hoy con toda su intensidad.
Este ensayo ofrece un análisis a la vez profundo y divulgativo de los puntos decisivos de la filosofía del pensador suizo, vertebrado en torno a una pregunta principal: ¿cuáles son las sendas que se abren ante el hombre enredado en la existencia y qué le espera a este al final de cada recorrido? Para responder a este interrogante, Todorov recurre a una lectura humanista y moral de los textos rousseaunianos. Existen tres caminos posibles: el de la naturaleza, el de la civilización y ―camino intermedio― la senda moral, que reconcilia los dos primeros. Pero esta senda no conduce automáticamente a la perfección. Rousseau conocía mejor que nadie las debilidades humanas y nuestra necesidad de conformarnos con la precariedad existencial, de lidiar con los obstáculos de la vida y aprender a convivir con una frágil felicidad.
El relato histórico del sionismo sobre Israel está construido sobre numerosas falacias y mentiras. Relatos ficticios que nos impiden entender los orígenes y la realidad actual del conflicto y que sutilmente arrojan dudas sobre el derecho moral de los palestinos a la tierra que ocupan.
En este innovador y polémico libro, el mundialmente reconocido historiador israelí Ilan Pappé examina los mitos esenciales que asientan el dominio sionista sobre la tierra palestina y que configuran la identidad del estado contemporáneo de Israel. Los relatos que explora Pappe –repetidos hasta la saciedad por los medios de comunicación, impuestos por el ejército de Israel, aceptados sin cuestionamiento por los gobiernos del mundo– refuerzan el statu quo regional. El autor explora de forma incisiva la afirmación de que Palestina era una tierra vacía en el momento de la Declaración de Balfour, así como la formación del sionismo y su papel en las primeras décadas de la construcción de la nación. Se pregunta si los palestinos abandonaron voluntariamente su patria en 1948 y si la guerra de junio de 1967 fue «inevitable». En cuanto a los mitos que rodean los fracasos de los acuerdos de paz y las razones oficiales de los ataques a Gaza, Pappe explica por qué la solución de dos Estados ya no es viable.