Nos gusta pensar que el futuro depende de nosotros mismos, pero la realidad es distinta: la Inteligencia artificial es la mano invisible que mueve los hilos de nuestra vida. Su potencial es ilimitado y, puesto al servicio de un bien común, nos permitiría encontrar la solución a los mayores desafíos de nuestro siglo. Pero ¿qué ocurre cuando ese poder recae en un pequeño grupo de personas?
Nuestro destino está hoy en manos de nueve grandes empresas de Estados Unidos y China. Por un lado, Amazon, Google, Apple, IBM, Microsoft y Facebook, que tienen grandes ideas sobre cómo resolver los mayores desafíos de la humanidad, pero que obedecen órdenes de sus accionistas. Por el otro, las empresas Baidu, Alibaba y Tencent cuyas acciones van ligadas al partido comunista chino. Y, en medio, nosotros. Las fuerzas externas que ejercen presión sobre esos nueve gigantes de tecnológicos conspiran en favor de sus propios intereses económicos y políticos.
Uno de los rasgos más característicos de los samuráis era la serenidad con la que se enfrentaban a su adversario, que encaraban con una objetividad y una concentración absolutas. Y es que sabían que para garantizar su victoria era necesario contar con una estrategia de combate imbatible.
Estos principios no sólo son aplicables en las artes marciales, sino que el uso de la técnica y la estrategia puede resultar fundamental para vencer a nuestros adversarios en cualquier ámbito. Pues tanto en los negocios como en la vida, nos enfrentamos a batallas constantemente y para resultar ganadores debemos contar con las herramientas adecuadas.
La obra de Miyamoto Masashi, el legendario samurái que jamás perdió un combate, analiza el proceso de lucha y dominio del conflicto que subyace en todos los niveles de la interacción humana y es uno de los textos más profundos jamás escritos sobre el arte de la confrontación y la victoria.
Un acercamiento perfecto para el público más joven a la cultura clásica y sus mitos, en una magistral versión de la última gran leyenda de la Edad Heroica, el asedio de Troya: con su caída comienza la Historia.