La Revolución francesa no solo hizo tambalear la política europea de su tiempo; en la ciudad alemana de Jena, una generación de jóvenes poetas, filósofos y escritores decidió, hacia 1800, repensar de nuevo el mundo. Los hermanos Schlegel junto con sus esposas, filósofos como Schelling, Fichte o Hegel, y poetas como Novalis o Tieck se congregaron en la pequeña ciudad universitaria para edificar una "república de espíritus libres". Además de cuestionar las tradiciones y la sociedad, contribuyeron a transformar nuestra comprensión de la naturaleza, la libertad y la entera realidad humana. Peter Neumann relata la portentosa existencia de esta comunidad de hombres y mujeres libres que sentaron las bases para la irrupción de la modernidad.
La democracia se halla en apuros. Acosada desde fuera por poderes económicos y desarrollos tecnológicos con incidencia global, y afectada desde dentro por prácticas que erosionan sus instituciones, así como por corrientes políticas, especialmente una ultraderecha que gana adeptos, que propugnan una antipolítica que la contradice, urge revitalizar la democracia. Sobreponiéndose a la melancolía política, este libro retoma la tradición republicana para construir alternativas viables.
Una democracia republicana y un republicanismo en clave socialista se presentan como hilos para tejer un republicanismo cosmopolita mediante una interculturalidad crítica y un humanismo otro que aliente la cultura cívica imprescindible para sostener el compromiso con la república por venir. Esta tarea, en la realidad política de España, ha de tener un perfil propio, acorde con nuestra historia y atendiendo a las condiciones de un presente en el que el republicanismo reclama una modulación más clara e intensa.
La República romana en transformación: de Sila a la muerte de César, recoge las contribuciones presentadas por reputados estudiosos procedentes de diferentes universidades españolas en la jornada científica homónima celebrada el 18 de noviembre de 2022 en el Edificio de Humanidades de la UNED. La obra no agota un tema por lo demás amplio, sino que en su conjunto ofrece una exhaustiva revisión y síntesis sobre uno de los periodos más complejos de la antigua Roma permitiendo dar respuesta a varias controversias, rechazar dogmas inválidos y abordar desde diversas ópticas y de manera asequible cuestiones de gran novedad e interés. En suma, esta obra nos brinda una mirada alternativa de la Historia teniendo presentes aquellas consideraciones solo manejadas por unos pocos.
Noam Chomsky es uno de los pensadores más respetados y leídos en el mundo por razones muy evidentes: sus textos señalan los crímenes de los poderosos, revelan los verdaderos motivos que se esconden tras sus acciones y, con mordacidad, denuncian las falacias de sus discursos autojustificativos. En definitiva, cumple con el deber que, de acuerdo al sentido común, cabría esperar de un intelectual. Sin embargo, no todos sus pares muestran ese mismo compromiso moral. A lo largo de su trayectoria política, Chomsky ha abordado de manera directa la cuestión de cuál es la verdadera responsabilidad de los intelectuales en dos ocasiones, dos escritos ya canónicos dentro de su prolífica obra, recogidos junto a un nuevo prefacio del autor en este volumen. A finales de los años sesenta, al calor de la guerra de Vietnam, Chomsky denunciaba las vergonzosas políticas del gobierno estadounidense y el no menos vergonzante papel de ciertos intelectuales al respaldarlas. En 2011, tras el «asesinato planificado» de Osama bin Laden, reflexionaba sobre la pertenencia de los intelectuales a la clase de los privilegiados y su obligación de cuestionar a las autoridades. Más relevante hoy que nunca, este libro nos recuerda que los privilegios «brindan oportunidades, y las oportunidades conllevan responsabilidades». Todos tenemos elección, incluso en tiempos desesperados.
Desde que las últimas tropas estadounidenses abandonaron Vietnam no nos habíamos enfrentado a un vacío tan repentino en nuestra política exterior, no solo de autoridad, sino también de explicaciones sobre lo que ha ocurrido y lo que nos depara el futuro. Pocos analistas están mejor preparados para abordar este momento que Noam Chomsky y Vijay Prashad, intelectuales y críticos cuyo trabajo abarca generaciones y continentes. Calificado como «la voz más leída del planeta en materia de política exterior» por el New York Times Book Review, Noam Chomsky se une al célebre académico Vijay Prashad —que «ayuda a descubrir los mundos brillantes ocultos bajo la historia oficial y los medios de comunicación dominantes» (Eduardo Galeano)— para llegar a las raíces de esta época de peligro y cambio sin precedentes. Chomsky y Prashad interrogan los puntos de inflexión clave en la espiral descendente de Estados Unidos: desde la desastrosa guerra de Irak hasta la fallida intervención en Libia y el descenso al caos en Afganistán. A medida que los últimos momentos del poder estadounidense en Afganistán se desvanecen, este libro crucial sostiene que no debemos apartar la vista de los restos y que necesitamos, sobre todo, una visión no sentimental del nuevo mundo que debemos construir juntos.
En todo el mundo, las democracias se enfrentan a un enemigo nuevo e implacable que no tiene ejercito ni armada; no procede de ningún país que podamos señalar en un mapa, porque no viene de ahí fuera, sino de aquí dentro. En lugar de desafiar a las sociedades libres con la destrucción desde el exterior, amenaza con corroerlas desde el interior. Un peligro como este es esquivo, difícil de identificar, de distinguir, de describir. Todos lo notamos, pero nos cuesta darle nombre. Se derraman ríos de tinta para definir sus elementos y características, pero se nos sigue escapando. Nuestro deber, por tanto, es nombrarlo para así comprenderlo, combatirlo y derrotarlo.
¿Que es este nuevo enemigo que atenta contra nuestra libertad, nuestra prosperidad y hasta nuestra supervivencia como sociedades democráticas? La respuesta es el poder, en una forma nueva y maligna. En todas las epocas ha habido una o más formas de maldad política; la que estamos viviendo hoy es una variante vengativa que imita la democracia al tiempo que la socava y desprecia cualquier limitación. Parece que el poder haya estudiado todos los controles concebidos por las sociedades libre.
Toussaint L´Ouverture fue el líder de la Revolución haitiana del pasado siglo XVIII, en la que los esclavos se rebelaron contra sus amos y establecieron la primera república negra. En esta colección de sus escritor y discursos, el expolítico haitiano Jean-Bertrand Aristide demuestra la profunda contribución de L´Ouverture a la lucha por la igualdad.
A comienzos del siglo xx, Rusia era un enorme imperio que se extendía desde Polonia, Ucrania y Bielorrusia en Occidente hasta el océano Pacífico en el Lejano Oriente. Al frente de este inmenso país estaba el zar Nicolás II, cuya dinastía, los Románov, había gobernado en Rusia desde principios del siglo xvii con una mezcla letal de crueldad hacia sus súbditos, expansionismo colonial e incompetencia reaccionaria.
En 1917, la Primera Guerra Mundial exacerbó las tensiones en Rusia. En marzo, Nicolás II abdicó y el gobierno provisional que ocupó su lugar para organizar unas elecciones democráticas duró solo ocho caóticos meses antes de que los bolcheviques de Lenin lo derrocaran. En La Revolución rusa, el prestigioso historiador Victor Sebestyen narra los apasionantes acontecimientos que, entre 1917 y 1924, llevaron a la fundación de la Unión Soviética.
Exquisitamente documentado, lujosamente ilustrado y repleto de personajes clave como Lenin, Trotski o Stalin, y de episodios dramáticos como el fusilamiento de la familia real o la rebelión de los marinos de Kronstadt, La Revolución rusa es una obra imprescindible para comprender unos acontecimientos que cambiaron el rumbo de la historia y siguen influyendo en nuestro presente.
La Revolución rusa, escrita por Rosa Luxemburg durante su estancia en la cárcel de Breslau, en Alemania, es una reflexión sobre las primeras medidas tomadas por la dirección bolchevique, en principio destinada a ser publicada en la revista de la Liga Espartaquista. Sin embargo, no vio la luz hasta 1922, tres años después del asesinato de su autora, debido al posicionamiento que esta había tomado con respecto al bolchevismo. En el escrito, Rosa mostraba su solidaridad con la Revolución rusa al tiempo que hacía una ardorosa defensa de la democracia que refleja fielmente la triple e inseparable dimensión de su pensamiento y su obra: socialista, demócrata y revolucionaria. El texto, muchas veces criticado y ocultado, merece hoy nuevos debates, pues su implacable lucha contra la guerra y el radicalismo con el que defendía la relación entre la libertad política y la igualdad social siguen teniendo, hoy como ayer, el mismo interés que cuando fue redactado.