Desde el indeleble recuento de su estancia por Arabia Saudí, pasando por la industria cinematográfica siria, el conflicto de Gaza, y un devastador artículo sobre la captura y las ejecuciones de los cuatro periodistas y cooperadores internacionales en manos del Estado Islámico y el estrepitoso fracaso de las democracias occidentales, en particular de Estados Unidos para hacer frente al conflicto que asola Oriente Medio, el lector se ve embarcado en una inquietante travesía por el mundo de la violencia yihadista, convirtiéndose en observador de perpetradores, cabecillas, lobos solitarios, víctimas y enemigos.
En los años veinte, la comunidad india de los Osage en Oklahoma era la población de mayor renta per cápita del mundo. El petróleo que yacía bajo sus propiedades les convirtió en millonarios: construyeron mansiones, tenían chóferes privados y mandaban a sus hijos a estudiar a Europa. Pero un espiral de violencia asoló esta comunidad indígena cuando sus miembros empezaron a morir y a desaparecer en extrañas circunstancias. La familia de una mujer Osage, Mollie Burkhart, se convirtió en un objetivo principal. Sus tres hermanas fueron asesinadas. Una fue envenenada, otra murió a tiros y la tercera falleció en una explosión. Otros miembros de la los Osage morían en circunstancias misteriosas, y muchos de los que se atrevieron a investigar los crímenes fueron también asesinados. Cuando el número de muertos alcanzó los veinticuatro, el recién inaugurado FBI decidió intervenir y fue uno de sus primeros grandes casos de homicidio. Después de que la investigación resultara un desastre, el joven director J. Edgar Hoover acudió al antiguo comandante de Texas, Tom White, para que desvelase el misterio. White estableció un equipo infiltrado, incluyendo a un agente nativo en el grupo.
En el siglo XVI, una nueva dinastía llegó al trono de las coronas unificadas de Castilla y Aragón. Desde la lejana Austria, los Habsburgo sumarían sus enormes territorios a los ya conquistados por los Reyes Católicos en América e Italia, formando el imperio más poderoso y extenso de Europa Occidental.
Durante doscientos años, los Austrias gobernaron unas veces con puño de hierro y otras con guante de seda. Se sucedieron guerras, traiciones, casamientos y amoríos secretos, mientras los tercios defendían sus posesiones europeas y los conquistadores las ensanchaban al otro lado del globo.
El Fisgón histórico, aliado con la pluma de David Nievas, desgrana en este divertida y novedosa historia ilustrada los reinados de estos poderosos monarcas y la época que les tocó vivir, analizando al detalle aquel imperio donde no se ponía el sol.