A Andrés le dieron una paliza a la salida de una discoteca. Salima tuvo que huir de su casa cuando le dijo a sus padres que pensaba en aquella chica como algo más que su amiga. A Sonia los abusos le llegaron desde sus propios compañeros de trabajo. Simon abandonó su país porque besar a su pareja allí era algo impensable. No comparten barrio, ni ciudad, ni orígenes ni empleos. Solo el dolor de saber que hay violencias que llegan a todos los rincones.
De cada uno de esos lugares parte esta gran investigación sobre crecer y vivir siendo queer en la España actual. Desde el colegio a la oficina, del hospital a los juzgados y de la calle a la intimidad del hogar, los protagonistas de este libro ven cómo estos espacios siguen condicionados por un mundo que juzga sus posiciones sobre género, amor y sexualidad.
Paul Watzlawick es una de las figuras clave de la psicología del siglo XX. De origen austriaco, se asentó en 1960 en Palo Alto, California, donde a través de sus investigaciones en el Mental Research Institute desarrolló la teoría de la comunicación que lo hizo famoso. Para explicarla, estableció cinco axiomas, entre los que incluyó el que da título a este libro: no es posible no comunicar. Se trata de una recopilación de textos, extraídos de sus obras principales, en los que el autor abordó a fondo la comunicación.
El constructivismo radical de Watzlawick niega la existencia de una verdad absoluta. Cuando alguien ha creído encontrar esa verdad, ha terminado cometiendo los mayores crímenes contra la humanidad. Al mismo tiempo, nos alerta sobre el impacto de los medios de comunicación en el comportamiento humano: «Han llegado al punto de lavarnos el cerebro como ningún gobierno totalitario consiguió jamás».
Según el autor no encontramos la realidad, sino que la creamos. Nuestra percepción de la misma es pura construcción subjetiva, y, por tanto, modificable. Watzlawick nos ofrece métodos para analizar situaciones confusas, suavizar conflictos y aclarar diferencias de opinión. No podemos esperar fórmulas y recetas definitvas, puesto que la infinita diversidad de la vida nos obliga a reaccionar de un modo diferentes y nuevo en cada ocasión. Sin embargo, podemos entender en qué consisten los problemas. La realidad es el resultado de la comunicación.
En esta valiosa y reveladora antología, la crítica cultural y exitosa autora Roxane Gay recoge piezas originales y publicadas anteriormente que abordan lo que significa vivir en un mundo donde las mujeres deben medir el acoso, la violencia y la agresión que enfrentan. Abarcando una amplia gama de temas y experiencias, desde una exploración de la epidemia de violación integrada en la crisis de refugiados hasta relatos en primera persona de abuso sexual infantil, esta colección es a menudo profundamente personal y siempre es decididamente honesta. Al igual que Los hombres me explican las cosas de Rebecca Solnit, , No es para tanto resonará en cada lector, diciendo "algo en totalidad que no podemos decir solos
El nuevo libro del filósofo vivo más leído del mundo.
«Hoy estamos en la transición de la era de las cosas a la era de las no-cosas. No son las cosas, sino la información, lo que determina el mundo en que vivimos.»
Hoy en día, el mundo se vacía de cosas y se llena de información inquietante como voces sin cuerpo. La digitalización desmaterializa y descorporeíza el mundo. En lugar de guardar recuerdos, almacenamos inmensas cantidades de datos. Los medios digitales sustituyen así a la memoria, cuyo trabajo hacen sin violencia ni demasiado esfuerzo. La información falsea los acontecimientos. Se nutre del estímulo de la sorpresa. Pero este no dura mucho. Rápidamente sentimos la necesidad de nuevos estímulos, y nos acostumbramos a percibir la realidad como una fuente inagotable de estos. Como cazadores de información, nos volvemos ciegos ante las cosas silenciosas y discretas, incluso las habituales, las menudas y las comunes, que no nos estimulan, pero nos anclan en el ser.
El nuevo ensayo de Byung-Chul Han gira en torno a las cosas y las no-cosas. Desarrolla tanto una filosofía del smartphone como una crítica a la inteligencia artificial desde una nueva perspectiva. Al mismo tiempo, recupera la magia de lo sólido y lo tangible y reflexiona sobre el silencio que se pierde en el ruido de la información.
El grito revolucionario de las madres contra la mordaza trans
Este libro es una apuesta por la verdad, cueste lo que cueste. Porque «para hacer frente a quienes viven y cooperan con el statu quo hay que arriesgar, perder el miedo y alzar la voz», defiende Nuria Coronado, que levanta el velo de silencio y falsa unanimidad que ha tendido en la sociedad el lobby transgenerista.
La periodista, escritora y madre alerta sobre el recorrido funesto de este movimiento ideológico que borra a la mujer y que en los últimos años ha logrado imponer el reconocimiento del género como identidad a través de terapias médicas experimentales y técnicas de manipulación social en adolescentes.
Frente a esta poderosa doctrina misógina amparada por las instituciones y la industria farmacológica, un grupo de mujeres sin miedo se articuló en torno al lema «No contaban con las madres». Coronado cede la palabra a estas activistas que «están dejándose la piel para que la sociedad española conozca los daños irreversibles» del transgenerismo en la salud mental y física en las y los menores de edad.
A sus testimonios la autora suma los de feministas, científicas, abogadas y psicólogas para desenmascarar la fantasía distópica del poder trans y rebelarse contra la usurpación de lo que significa nacer mujer.
«[Este libro] es un grito revolucionario frente a la mordaza. [...] Es la voz que la censura no tiene ni poder ni dinero suficiente para comprar. Porque el amor de madre no se vende».
Al frente del panteón intelectual del siglo XIX se encuentran las figuras de Karl Marx (1818-83), Sigmund Freud (1856-1939) y Friedrich Nietzsche (1844-1900). La crítica de Marx al sistema socioeconómico y el análisis de Freud de la vida psicosexual han sido bien asimiladas a finales del siglo XX y principios del XXI. Sin embargo, las ideas de Nietzsche continúan en el horizonte de la conciencia moderna: un desafío inquietante, incluso aterrador, que sabía que no se iba a ser aceptado durante su propia época. "Imagina un libro que no hable de otra cosa más que de los acontecimientos que tienen lugar fuera de la posibilidad de experiencias generales o, incluso, raras: el primer lenguaje de una nueva gama de experiencias. En este caso, ¡no se oirá nada!".