Adolfo Posada, uno de los publicistas más destacado del siglo XX, redactó El Sufragio. Según las teorías filosóficas y las principales legislaciones en pleno debate sobre la crisis del parlamentarismo que se vivía durante la Restauración. La corrupción electoral, el caciquismo o el abstencionismo eran males endémicos que sólo podían superarse, según Posada, merced a una honda reestructuración del voto individual a cuyo través se ejercía la soberanía popular. En sus sistemáticas reflexiones –acompañadas de una mirada a los sistemas electorales comparados que él consideraba más dignos de imitación– el jurista asturiano profundizó sobre los distintos elementos del sufragio, sus clases, la administración electoral y sus garantías, proponiendo un auténtico sufragio universal, en el que, por supuesto, se incluyera a las mujeres. La obra supuso un esbozo teórico de una realidad que pondría en práctica la Segunda República una treintena de años más tarde, pero planteó también cuestiones que a día de hoy, más de un siglo después, todavía son objeto de debate.
Gilbert Keith Chesterton (1874-1936) postula en sus obras la idea de una sociedad más justa moral y políticamente, de una utopía alejada de la ingeniería social. Aunque la verdadera perfección no es alcanzable en este mundo y ningún orden político puede traer el paraíso a la tierra, sí es posible mitigar el mal y el dolor por medio de un orden político más justo mientras buscamos la verdadera salvación del alma. El sueño utópico de G. K. Chesterton aspira a recuperar el significado normativo de la utopía tal y como la formuló este autor a través de su pensamiento imaginativo y de sus célebres paradojas.
El Mediterráneo es un mar aparentemente plácido sobre el que a menudo se ciernen negros nubarrones, un lugar de encuentro y a la vez de conflicto, cuna de los mitos clásicos y de las grandes religiones monoteístas, escenario de algunas de las más deslumbrantes creaciones de la humanidad y campo de batalla de terribles guerras. Con extraordinaria amenidad, José Enrique Ruiz-Domènec construye un elegante retrato del mundo mediterráneo desde la Antigüedad clásica hasta nuestros días que integra ideas y acontecimientos, figuras históricas y literarias, intrigas políticas y pasiones humanas, obras de arte y libros de una biblioteca del conocimiento universal.
De la muerte de Sócrates a Carlomagno, de Marco Polo a Napoleón y los sabios de Egipto, de Trieste a Israel, de la Barcelona olímpica a la guerra de los Balcanes,El sueño de Ulises es la gran obra de un maestro de la historiografía que, después de cuarenta años de estudio sobre el Mediterráneo y de diversos libros de éxito, presenta la síntesis definitiva de un crisol de civilizaciones que ha marcado el curso de la historia de forma indeleble a lo largo de tres mil años.
Con una habilidad narrativa fascinante, el autor ofrece una iluminadora reflexión sobre la importancia del legado mediterráneo en la cultura mundial, desde la guerra de Troya, que inspiró la poesía épica de Homero, hasta las pateras, que llegan hoy a nuestras costas y constituyen la imagen de nuestras peores decisiones. Un libro de historia para viajar al pasado, entender el presente y pensar el futuro.
Este singular libro parte de un breve viaje de su autor, y de un largo periplo como lector (el viaje a otros viajes) con el que Alejandro J. Ratia teje un cuadro polifónico en el que los caminos de sus personajes se entrecruzan. Se trata de un periodo (primera mitad del siglo XX) en que convivían la exaltación del exotismo y la crítica al modelo colonial, tiempos en que viajar hasta Tahití o Bora Bora no era ya aventura alguna, nada comparado a los relatos fundacionales de Bougainville, Cook y Wallis, cuando aquel país (anticipado por fabulaciones y poemas) apareció de repente como un sueño hecho realidad, una maravilla que corría el peligro de esfumarse al tocarla. Era el destino perfecto, paraíso del sexo, donde se vivía sin trabajar y la comida brotaba de los árboles.
De la cultura tahitiana aún quedaban los rescoldos cuando recalaron por allí Stevenson, Gauguin o Pierre Loti, pero el sueño polinesio se había reconvertido ya en un mito paradójico, respecto al espíritu explorador o el impulso predatorio. El universo mítico que rodea a Tahití, como viaje de ida y vuelta, será el destino perfecto no tanto del emprendedor aventurero como del soñador disoluto, preso de la tentación de la indolencia. Pocos de los personajes retratados por Ratia se decidieron a morir allí. Todos llegaron a tiempo de abordar una arqueología de la aventura. Tahití es ese lugar al que se planea viajar para encontrarse de vuelta en casa.
En Francia la moderna literatura de viajes tiene un padre indiscutible: Pierre Loti. Un autor tan inusual y prolífico que ha contagiado la pasión por las cosas del mundo a más de una generación de escritores y viajeros, y no solo en Francia. Excesivo, barroco, amante de los disfraces y la heterodoxia, Álex Fraile sucumbió a la admiración por este personaje superlativo; a veces provocador, otras, extravagante o cínico, pero siempre rendido a los encantos de lo desconocido. Desde hace años Fraile ha ido visitando muchos de los lugares donde vivió el famoso marino y escritor francés, ya sea China, Japón, Turquía, Senegal, Camboya, Birmania o Madrid y Andalucía, donde pasó su luna de miel, sin olvidar el país vasco francés, donde murió.
Si El sofista es uno de los diálogos de Platón que más ha atraído a estudiosos y amantes de la Filosofía, ello está motivado tanto por su contenido y relevancia en el conjunto de la obra platónica, como por la influencia que, hasta nuestros días, ha ejercido en la conformación de importantes conceptos del pensamiento occidental. El diálogo, que plasma el desafío que representa "cazar" al sofista mediante las redes de la dialéctica, llega a la conclusión de que éste es un imitador que se mueve con total libertad en el ámbito de la falsedad y la apariencia, en contraste con el sabio y el filósofo, dedicados a la búsqueda de la verdad.
«Hace tiempo, en su clásico trabajo sobre la representación, Hanna Pitkin reconoció que no podemos entender plenamente la representación sin adoptar una perspectiva sistémica. Sin embargo, ni Pitkin ni yo, al abogar por un enfoque sistémico, profundizamos en el tema. Felipe Rey Salamanca ha elaborado ahora el trabajo definitivo hasta la fecha». Así introduce la profesora emérita de Harvard Jane Mansbridge esta obra.
Su autor nos sugiere que la democracia representativa como la conocíamos, localizada en las estructuras parlamentarias, ha dejado de existir. Rey introduce y desarrolla un concepto nuevo, el de los sistemas representativos, en los cuales la representación política es una práctica mucho más extensa que es ejercitada tanto en los órganos oficiales como en la esfera civil. El parlamento ha perdido el monopolio de la representación. La democracia parlamentaria está en su ocaso. Con rigor analítico y destreza argumentativa, Rey ha dibujado una nueva y refrescante teoría de la representación para entender mejor nuestros mundos políticos contemporáneos.
Desde su independencia de la Corona británica el interés por la organización política estadounidense ha sido objeto de atención por parte de todo tipo de estudiosos. El fin de la Segunda Guerra Mundial vio cumplido el conocido vaticinio de Alexis de Tocqueville de que Estados Unidos y Rusia tendrían «un día en sus manos los destinos de la mitad del mundo, el primero dominado por la libertad como medio de acción, y la segunda, por la servidumbre». La liquidación de la Unión Soviética convirtió a la república norteamericana en la principal potencia hegemónica mundial, cuya vulnerabilidad sin embargo quedó al descubierto tras los atentados del 11-S. Este libro constituye un manual universitario de primer orden, y además una útil herramienta para todo aquel que desee adentrarse en temas básicos del sistema político de Estados Unidos: la vigencia del excepcionalismo como visión propia de su desarrollo histórico; la importancia del liderazgo presidencial en sus diferentes roles, sus aciertos y errores; el funcionamiento y organización del Congreso, extremadamente polarizado especialmente bajo las últimas presidencias de Clinton, Bush y Obama, dificultando la toma de decisiones sobre la deuda y el déficit públicos, la extensión de los derechos civiles, el desempleo estructural o la política de inmigración; la importancia de los tribunales y el derecho en la judicialización de la vida política y en el desarrollo de las libertades públicas, destacando las sentencias cruciales del Tribunal Supremo de EEUU; el declive de la participación electoral; la singularidad de los partidos políticos con respecto a la tradición europea, el sistema de partidos y su evolución; las formas y vías de actuación de individuos y corporaciones que presionan y tratan de influir en la rama ejecutiva y en el Congreso; o la cultura como soft power del american way of life, reflejada en la relación de películas, documentales y series de televisión que acompañan cada capítulo.
Imprevisible y sin embargo regular, siempre nueva a la vez que inteligible, la moda no deja de interesar a psicólogos, sociólogos y estetas. En este libro, sin embargo, Roland Barthes la cuestiona desde un punto de vista distinto: considerándola a través de las descripciones de la prensa, descubre en ella un sistema de significaciones y la somete por primera vez a un verdadero análisis semántico. ¿Cómo los hombres y las mujeres pueden crear sentido a través de sus vestimentas?