Última de las obras que escribió Cicerón (106-43 A.C.) sobre retórica, " El orador " es aquella en que revela con mayor claridad sus ideas sobre esta disciplina. En ella trata de las condiciones que debe poseer el orador ideal, de los diversos estilos de oratoria, de la armonía de la frase y, finalmente, de las partes del discurso y del ritmo que debe caracterizarlo. Compuesto en el año 46 A.C., " El orador " constituye un texto clave de la teoría literaria de la Antigüedad.
Durante siglos, el oro blanco ha fascinado a emperadores, alquimistas, filósofos, artesanos y coleccionistas: todos ellos querían descubrir la receta de esa sustancia tan preciada. La búsqueda de la porcelana es el punto de partida que utiliza Edmund de Waal para viajar a lugares tan dispares como China o Inglaterra con compañeros tan insólitos como un príncipe Médici, un monje jesuita o un cuáquero del siglo XVIII. Un libro especial, una joya, un relato sobre la historia de una obsesión en el que De Waal recupera la belleza y el espíritu de La liebre con ojos de ámbar.
A lo largo del siglo xx tomó cuerpo una iniciativa única en la historia de la humanidad. Los Estados, que desde Tucídides hasta Bismarck se habían caracterizado por su aspiración a la soberanía y la independencia, se unieron gradualmente para crear organizaciones internacionales con el fin de promover la paz, impedir las agresiones, regular los asuntos diplomáticos, elaborar un código legal internacional, fomentar el desarrollo social e inspirar un mundo de prosperidad. Así, y tras muchas vicisitudes, nació la ONU.
Largamente esperado, el trabajo de Paul Kennedy, uno de los historiadores con mayor prestigio de la actualidad, analiza esta estructura política fundamental del siglo xx desde las formas iniciales de organización internacional y sus funciones en el mundo de la posguerra hasta los principales acontecimientos y los problemas geopolíticos actuales, para proponer cómo debe transformarse la institución -frente a las nuevas amenazas para la seguridad internacional y el impulso del mundo global- durante el siglo XXI, pues es una urgente responsabilidad colectiva lograr que este «Parlamento» mundial de Estados funcione lo mejor posible ante los retos del futuro.