Ganador del premio Temple Grandin, concedido por la prestigiosa Autism Society de Estados Unidos, el doctor Barry M. Prizant lleva a cabo en "Seres humanos únicos" un acercamiento riguroso, personal y muy humano a todas las vertientes del autismo. Prizant presenta con suma sensibilidad un nuevo enfoque (SCERTS) centrado en la intervención integral, basado en hechos, para niños y personas mayores con algún Trastorno del Espectro del Autismo (TEA) y para sus familias. Un libro repleto de experiencias y testimonios en el que la voz del especialista y de los pacientes cobran una vida común, donde el aprendizaje constante y el desarrollo de las relaciones humanas adquieren una importancia fundamental. Como Prizant sostiene, «el autismo no es una enfermedad. Es una manera diferente de ser humano». Esta nueva edición, cuidadosamente revisada y ampliada teniendo en cuenta los más recientes avances en el campo, cuenta también con la perspectiva aportada por aquellos pacientes, familiares y profesionales que leyeron su primera versión, siempre buscando afinar la comprensión y el cuidado de las personas con TEA.
Para todo gobernante, como para todo jefe militar, es imprescindible conocer las circunstancias concernientes a sus antagonistas y adversarios (reales o potenciales), con el fin de neutralizar cualquier amenaza y afianzarse en el poder. Sin esa información, las probabilidades de que un gobierno sea derrocado, o de que un general sufra una severa derrota, aumentan de forma exponencial. De ahí que las actividades y servicios de inteligencia hayan sido una constante a lo largo de la historia.
A pesar de la importancia fundamental de este fenómeno, su existencia ha sido a menudo soslayada en lo que respecta a las sociedades del pasado. Sea por la dificultad que entraña la frecuente escasez de fuentes, por el temor a pecar de anacronismo o debido a inconscientes prejuicios idealistas, manuales y monografías acostumbran a negligir el tratamiento del papel desempeñado por las actividades de espionaje y contraespionaje en la Antigüedad.
Gobernantas, mayordomos, niñeras, cocineros o chóferes trabajan de mañana a noche para satisfacer las necesidades y deseos de los millonarios a los que sirven. ¿Cuánto se cobra, cuál es el coste emocional, y qué está en juego en esta relación extrema de "servicio"? La socióloga Alizée Delpierre nos ofrece una visión única de lo que sucede en los hogares de los más poderosos y desvela las complejas dinámicas que mantienen con sus empleados, quienes protegen y sostienen este mundo privilegiado tan inaccesible frente a la esperanza de un posible ascenso social.