Un volcán cubre tu pueblo de ceniza
Han secuestrado a tu mujer
Tu día acaba de empezar
Puerto Deseado, Patagonia Argentina, 1991. Raúl Ibáñez necesita dos trabajos para llegar a fin de mes. Cuando apaga el despertador para ir al primero de ellos, sabe que algo va mal. Su pequeño pueblo ha amanecido cubierto por la ceniza de un volcán y Graciela, su mujer, no está en casa.
Todo parece indicar que Graciela se ha ido por voluntad propia... hasta que recibe la llamada de los secuestradores. Las instrucciones son claras: si quiere volver a verla, tiene que devolver el millón y medio de dólares que robó.
El problema es que Raúl no robó nada.
Un thriller psicológico rápido y desconcertante. Una nueva voz talentosa y distinta que llega de la autopublicación.
A finales de marzo de 1944, a medida que las tropas soviéticas se adentran en Ucrania, Emil y Adeline Martel se ven obligados a tomar una agónica decisión: ¿deben esperarlas y arriesgarse a ser enviados a Siberia? ¿O seguir a regañadientes a los peligrosos oficiales nazis que han jurado protegerlos? Los Martel son una de las muchas familias de ascendencia alemana cuyos antepasados han trabajado la tierra en Ucrania durante más de un siglo. Pero tras vivir bajo el régimen de terror de Stalin, la joven pareja decide que su mejor opción es huir en retirada junto a los nazis, a los que desprecian, para escapar de los soviéticos en busca de su libertad.
Atrapados entre dos fuerzas en lucha y enfrentados a terribles dificultades para lograr su objetivo de llegar al oeste, la historia de los Martel es un emocionante, desgarrador y, finalmente, esperanzador relato que ilumina el extraordinario poder del amor y de los sueños y la increíble voluntad de sobrevivir de una familia.
La obstetra Dra. Sophie Savard regresa a casa con los ritmos dolorosamente familiares de Manhattan a principios de la primavera de 1884 para reconstruir su vida despues de la muerte de su esposo. Con la ayuda de la Dra. Anna Savard, su amiga más querida, prima y compañera medica, planea continuar su trabajo ayudando a las mujeres desfavorecidas que la sociedad preferiría olvidar.
Mientras Sophie se dispone a construir una nueva vida para sí misma, el marido de Anna, el sargento detective Jack Mezzanotte les invita a ambas a consultar sobre dos nuevos casos: la esposa de un prominente banquero ha desaparecido en el aire y el cadáver de una joven se encuentra con heridas desconcertantes que sugieren que un asesino anda suelto. En Nueva York parece que el avance de la mujer ha sacado lo peor de algunos hombres. Incapaces de ignorar la difícil situación de los menos afortunados de Nueva York, estas intrepidas primas recurren a todos los recursos para proteger a sus pacientes.
Con un toque de Jane Austen, La carta de Miss Lattimore es una elegante comedia romántica de época que devorarás en una sola sentada.
La joven Sophie Lattimore no puede quedarse de brazos cruzados cuando descubre que un caballero está a punto de proponerle matrimonio a la mujer equivocada. Para evitar este error, Sophie decide enviar una carta anónima para poner al joven sobre aviso, carta que rápidamente se convierte en la habladuría de la alta sociedad, especialmente cuando su consejo resulta ser correcto. Lo que Sophie no espera es que, con todo el revuelo, se descubra que es la autora de la nota, y la que anteriormente se viera relegada a un segundo plano durante la temporada de bailes y cortejos en Londres, se convierta en la joven más buscada, y no solo por su gran habilidad de emparejamiento.
Barcelona, 2012. Bruno, Raquel y Cristian parecen haber dado con el negocio que les sacará de la miseria, de dormir en parques y cajeros automáticos. Bruno controla el negocio. Su novia, Raquel, extoxicómana, lleva la contabilidad, y Cristian hace el trabajo de campo. Es un negocio tan limpio y sencillo que es increíble que no se le haya ocurrido a nadie antes. Se apostan alrededor de las casas de citas donde las parejas acuden de día y de noche. Al salir, las siguen, apuntan las matrículas de los coches, consiguen saber quién es el titular del vehículo y después llaman y ponen precio a su silencio. Los chantajes empiezan dando buenos resultados, pero llegará el momento en que se equivoquen de víctima.
«Tenemos que hablar», le dice Lola a su marido durante el desayuno. Él le responde que lo harán por la noche, cuando acabe su jornada en el taxi. Sandino es un hombre melancólico, que duda en regresar a casa porque teme que Lola, harta de sus infidelidades, lo deje. No está muy seguro de si desea que eso suceda, como tampoco sabe si le gusta ser taxista, si es capaz de querer a alguien o si todo consiste en seguir rodando y chocando, como una bola en una mesa de billar llamada Barcelona.
Durante siete días y sus seis noches, Sandino recorre las calles y los barrios como un muñeco roto que huye de sí mismo, un depredador que deambula sin rumbo fijo, de sitio a sitio, a criterio siempre del cliente, del tedio o de la ocasión de cauterizar la herida de la forma más carnal.