Ahí, al otro lado, en el camino, escucha la lengua secretos que yo no debo conocer y los transmite a otros que no quieren oírlos. ¿Por qué no se quedó conmigo, al margen, por qué se separó de mí? Está en el vacío. El vacío es el camino. Y yo me encuentro incluso al margen del vacío.¿Cómo consigo que todas estas palabras mías digan algo que pueda decirnos algo? No con el mero hecho de que yo hable. Es que no puedo hablar.*Existe una profunda relación entre la cita y los muertos. A través de ella se establece un misterioso diálogo entre vivos y muertos. Todo le es propio y, al mismo tiempo, ajeno. La cita apuntala y refuerza y, por tanto, hace aparecer no solo lo citado sino también al citado, lo hace comparecer.
Países Bajos, siglo XVII. La joven Griet, de dieciséis años, entra a trabajar al servicio de Johannes Vermeer en la ciudad de Delft. Griet parece saber cuál es su papel en la casa: ocuparse de las tareas domésticas y cuidar a los seis niños del pintor. Sin embargo, la sensibilidad de la muchacha llama la atención de Vermeer, quien le abre las puertas de su mundo y su trabajo. A medida que la intimidad crece entre ambos, también lo hacen la tensión y los celos. Y pronto, llega el escándalo.
Tracy Chevalier logra consagrarse en el género de la ficción histórica con esta novela que ya es un clásico contemporáneo.
Vienna, 1938. Samuel Adler is five years old when his father disappears during Kristallnacht-the night his family loses everything. As her child's safety becomes ever harder to guarantee, Samuel's mother secures a spot for him on a Kindertransport train out of Nazi-occupied Austria to England. He boards alone, carrying nothing but a change of clothes and his violin. Arizona, 2019. Eight decades later, Anita Dìaz and her mother board another train, fleeing looming danger in El Salvador and seeking refuge in the United States. But their arrival coincides with the new family separation policy, and seven-year-old Anita finds herself alone at a camp in Nogales. She escapes her tenuous reality through her trips to Azabahar, a magical world of the imagination. Meanwhile, Selena Durán, a young social worker, enlists the help of a successful lawyer in hopes of tracking down Anita's mother. Intertwining past and present, The Wind Knows My Name tells the tale of these two unforgettable characters, both in search of family and home. It is both a testament to the sacrifices that parents make and a love letter to the children who survive the most unfathomable dangers-and never stop dreaming.