El misterio iniciado en El silencio de la ciudad blanca llega a su fin.
El esperado desenlace de la Trilogía de la Ciudad Blanca.
El misterio llega a su fin.
Vitoria, 2019. Los señores del tiempo, una épica novela histórica ambientada en el medievo, se publica con gran éxito bajo un misterioso pseudónimo: Diego Veilaz.
Victoria, 1192. Diago Vela, el legendario conde don Vela, retorna a su villa después de dos años en una peligrosa misión encomendada por el rey Sancho VI el Sabio de Navarra y encuentra a su hermano Nagorno desposado con la que era su prometida, la noble e intrigante Onneca de Maestu.
Unai López de Ayala, Kraken, se enfrenta a unas desconcertantes muertes que siguen un modus operandi medieval. Son idénticas a los asesinatos descritos en la novela Los señores del tiempo: un envenenamiento con la «mosca española» ―la Viagra medieval―, unas víctimas emparedadas como se hacía antaño en el «voto de tinieblas» y un «encubamiento», que consistía en lanzar al río a un preso encerrado en un tonel junto con un gallo, un perro, un gato y una víbora.
Las investigaciones llevarán a Kraken hasta el señor de la torre de Nograro, una casa-torre fortificada habitada ininterrumpidamente desde hace mil años por el primogénito varón. Pero el reverso de tanta nobleza es la tendencia de los señores de la torre a padecer el trastorno de identidad múltiple, un detalle que arrastrará a Estíbaliz a vivir una arriesgada historia de amor.
Una novela que nos habla del amor en el siglo XXI y, sobre todo, del amor propio, el crecimiento personal y la lucha contra los estándares sociales.
Karma (Laura) es una mujer que roza los treinta. Trabaja de teleoperadora en unos grandes almacenes y comparte piso con su amigo Roberto. Son una dupla galáctica y funcionan mejor que cualquier matrimonio convencional.
La vida de Karma da un vuelco de ciento ochenta grados cuando conoce a Leo, su match de Tinder. Leo acaba con todos sus miedos y hace que se sienta como una diosa en la cama y fuera de ella.
Sin embargo, ella convive con los monstruos de su pasado, con la carga de pesar más de lo que la sociedad acepta como normativo, con la necesidad de volver a terapia y con la creencia de tener una autoestima que en realidad no es tan férrea como ella piensa.
Karma somos un poco todas, Karma se construye de todas las mujeres que me inspiran, Karma soy yo.
¿Por qué se le han de romper los esquemas a una mujer empoderada cuando un hombre aparece en su vida?
Tras su exitoso debut con La vida en un minuto, en esta emotiva novela Jose Antonio Lucero nos descubre la valiosa figura de las madrinas de guerra y su olvidado papel en la Guerra Civil.
¿Puede una carta de amor cambiar una vida o detener una guerra?
¿Esperarías esas palabras hasta el final de tus días?
Madrid, 1936. Aurora acaba de cumplir la mayoría de edad y ejerce como enfermera en una ciudad convulsa que resiste al fuego y a las bombas de la guerra. En este clima de violencia, decide contribuir a la esperanza en el frente republicano y comienza a escribirse con un joven soldado, Teófilo, convirtiendose así -como otras muchas mujeres de la epoca- en madrina de guerra.