El asesinato de Roger Ackroyd rompió todas las reglas de la novela policíaca y convirtió a Agatha Christie en un nombre reconocible.
Roger Ackroyd sabe demasiado. Sabe que la mujer que ama envenenó a su brutal primer marido. También sospecha que alguien la ha estado chantajeando. Ahora, trágicamente, le llega la noticia de que se ha quitado la vida con una sobredosis de drogas.
Pero el correo de la tarde trae a Roger una última y fatal información, que puede aportar alguna luz sobre la identidad del chantajista. Por desgracia, antes de que pueda terminar de leerla, es apuñalado por la espalda hasta morir.
Si usted no sabe nada de este libro le damos dos consejos: no comentarlo con nadie, y leerlo a toda velocidad, ya que contiene una de las mayores sorpresas de la historia de la novela negra.
Alaxi Dalem está acostumbrado a una vida demasiado tranquila, como agricultor y padre de familia, en un pueblo perdido del desierto de Mojave.
Cuando recibe la visita de dos militares su pasado le explota en la cara: Lena Gradavi, alto mando de defensa, ha sido secuestrada en el Karón, un proyecto que crearon a medias en la universidad.
Dicha máquina crea mundos virtuales, a partir de los recuerdos, y tuvo que ser prohibida y retirada. Alaxi es el único capaz de conectarse.
¿Por qué ha vuelto allí Lena? ¿Quiénes la retienen? Su marido, el general Ritcard, teme por Quimera, el sistema de datos que gobierna el país.
Alaxi acepta conectarse a la mente de Lena, pero sus males acaban de empezar: ella es también su ex y él la dejó de la peor manera, lo que convierte la misión en un auténtico infierno.