La sombra de Bacus ha dejado una huella terrible en la vida de Ares Parisi y, tras sus últimos descubrimientos sobre Adonis, esta parece aún más oscura. Sin embargo, su objetivo sigue imperturbable: no descansará hasta ver caer a la Corte, aunque para ello deba dejar sus sentimientos a un lado y continuar con su vir para celebrar la Liberalia, la noche sagrada en la que tendrá lugar el ritual más peligroso hasta la fecha.
Ares deberá obviar todo lo que Adonis despierta en ella con cada caricia, cada roce..., y llevar su papel de virtuosa hasta el final. Solo así podrá encender el fuego que reside en su interior y conseguir que las llamas iluminen la ciudad y hagan a los demonios arder.
Fadhil al-Azzawi (Kirkuk, Irak, 1940), afincado en Berlín desde hace más de cuarenta años, es la cabeza visible del llamado grupo de Kirkuk. Poeta, novelista, memorialista, periodista, ha cultivado todos los géneros y su figura se ha ido engrandeciendo con el paso del tiempo. Dotado de una imaginación portentosa y de una capacidad de observación fuera de lo común, es un poeta lúdico y versátil, natural. Se presenta aquí una selección de sus Obras Poéticas. En su larga vida Fadhil al-Azzawi ha publicado una docena de recopilaciones de versos. La mayor parte de su vasta y extraordinaria obra permanece todavía inédita en español.
Un niño es testigo de un violento enfrentamiento en una carretera perdida en el departamento del Cauca, en Colombia. Ese mismo día alguien limpia las huellas del desastre para que no quede el menor rastro. Nadie en el pueblo más cercano dice haber oído nada, y sin embargo, una denuncia anónima pone en marcha una peligrosa investigación que desemboca en el universo oscuro de las iglesias cristianas que hoy están presentes en toda América Latina. Será larga la noche es una novela de suspense salpicada de notables momentos de humor y de dolor; una historia que desvela la desigualdad y la violencia que no dan tregua a todo un país.
En la gélida estepa rusa, los cuentos de hadas han demostrado ser mucho más que meras historias. Y allí, acusada de cometer brujería por recibir el apoyo del rey del invierno, Vasia se enfrenta a una elección imposible: contraer matrimonio o ingresar en un convento.
Para evitar ambos destinos, la joven se viste de hombre y huye a lomos de su fiel semental Solovéi. Pero por el camino un incidente la conduce al palacio real de Moscú, donde se verá envuelta en las intrigas de la corte mientras intenta desentrañar una extraña amenaza y ocultar al príncipe su verdadera identidad. Y entretanto, el rey del invierno continúa brindándole sus consejos, tan útiles como quizá traicioneros...
Pues todo el mundo sabe que la ayuda de los inmortales tiene un precio, y el demonio de las heladas no es una excepción.
La chica en la torre es la esperada segunda parte de la trilogía de El oso y el ruiseñor, una preciosa serie ambientada en la Rusia medieval que ha hechizado a la crítica y a los lectores en más de veinte idiomas.
Corren los años setenta del siglo XIX y el joven Will Andrews, recién graduado en la Universidad de Harvard, decide dejar el bullicio de la gran ciudad e irse al Oeste para encontrar un lazo de unión con la naturaleza. Por el camino, Will recala en una aldea de Kansas llamada Butcher’s Crossing, un lugar donde la única diversión es tomar copas con hombres que han perdido ya muchas batallas y acariciar a mujeres cansadas de tanto traficar con el placer. Todo parece tristemente anodino en ese pueblo alejado de las aventuras soñadas por Will hasta que el muchacho traba amistad con Miller, un experimentado cazador de búfalos. Miller y Andrews, seguidos por otros dos compañeros, emprenden una aventura que los llevará a una pradera de ensueño donde esos animales abundan. Uno tras otro, los búfalos caen, pero el invierno acecha y la codicia de los hombres se cobrará su precio.
Apolo Hidalgo está emocionado por enfrentarse a una nueva etapa de su vida: la universidad. Su sueño es estudiar psicología y ayudar a los demás. Sin embargo, esa ilusión se rompe cuando es atacado y golpeado en un callejón durante una noche lluviosa e, irónicamente, así es como la conoce a ella. A Rain.
La chica del paraguas lo salva, y se le queda grabada en la memoria. Cuando finalmente se vuelven a encontrar, Apolo queda todavía más prendado de Rain y, a través de ella, conoce a Xan, el dueño de un café donde pasan el rato.
A medida que los tres se conocen, Apolo se dará cuenta que Rain y Xan ocultan mucho más de lo que uno se puede imaginar.